El polvo es uno de los enemigos habituales a los que nos enfrentamos a la hora de limpiar la casa.
Seis formas de mantener el polvo a raya sin aspiradora
Es importante mantener una rutina de limpieza regular para evitar que el polvo se acumule en muebles, suelos y superficies.
Además de ser antiestético, el polvo puede causar problemas de salud, especialmente en personas alérgicas o con problemas respiratorios.
Esto se debe a que, con el tiempo y a pesar de una limpieza periódica, es inevitable que tanto los muebles como el resto de objetos y superficies del hogar queden cubiertos por estas partículas de una forma u otra.
En el domicilio, este conjunto está formado principalmente por un conjunto de restos procedentes de diferentes procedencias, tanto del interior como del exterior de la vivienda. En casa, el polvo puede hacerse visible por la mezcla de distintos residuos, como pelos o piel muerta, restos de insectos o partículas del exterior, entre otros.
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