Plan de relevo generacional en Extremadura para combatir la despoblación
La presidenta de la Junta de Extremadura, María Guardiola, anunció la implementación a lo largo de 2025 de un «ambicioso plan» de relevo generacional que facilite la continuidad de las empresas y negocios de la comunidad, como medida para consolidar la población y promover la cohesión territorial.
La presidenta del Ejecutivo regional hizo este anuncio durante su participación en el encuentro «Retos y oportunidades en la España rural: Extremadura», organizado por Fundación Mapfre en colaboración con la Junta de Extremadura y la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), con el objetivo de analizar las claves que liderarán el desarrollo del medio rural en esta comunidad.
En el evento, celebrado en Mérida, estuvieron presentes la Infanta Doña Elena, Directora de Proyectos de Fundación Mapfre, así como la Directora de Fondos Sociales de la Fundación Mapfre, Lola Moya, junto con representantes de las administraciones públicas, del sector privado del tercer sector, del sector rural de Extremadura y de las poblaciones más vulnerables.
Estos participantes discutieron sobre las claves para impulsar el desarrollo de soluciones innovadoras y adaptadas al entorno en dos ejes principales: la retención del talento y el fomento del emprendimiento; y planes y apoyo para una vida independiente.
El presidente extremeño inició su intervención con un reconocimiento a todas las personas que viven y trabajan en el mundo rural de Extremadura, destacando que son la «esencia de esta tierra», sus raíces y la «fuerza que mantiene vivas las tradiciones» y que «luchan, a pesar de las dificultades, por un futuro mejor» y que su gobierno «los apoyará y tiene un fuerte compromiso con todos ellos».
Un foro «necesario» para reflexionar sobre las oportunidades y desafíos del mundo rural extremeño, que es un espacio «lleno de posibilidades, lleno de oportunidades y lleno de futuro», con «un potencial enorme si se aplican las medidas realmente adecuadas».
Para Guardiola, la transformación de la región pasa por el campo, porque es un «motor económico y social indiscutible» para Extremadura, que reúne «mucho talento, mucha constancia y las ideas muy claras».
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