Lugar más sucio en tu dormitorio
Este elemento del dormitorio, a menudo descuidado durante la limpieza, es, sin embargo, crucial para su bienestar. Aquí tienes las acciones adecuadas para evitar que tu salud se resienta.
El dormitorio suele considerarse un remanso de paz, un refugio donde escapar del tumulto cotidiano. Sin embargo, detrás de esta aparente tranquilidad se esconden enemigos invisibles. Incluso en este espacio que cuidamos y mantenemos habitualmente, gérmenes e impurezas, invisibles a simple vista, anidan en rincones insospechados. También hay un elemento que tendemos a descuidar a pesar de su importancia. Suficiente para pagar el precio de un verdadero parque de juegos para ácaros y bacterias.
Es esencial el mantenimiento regular del dormitorio. El dormitorio, un auténtico refugio, merece ser mimado para proporcionar un espacio relajante y aire saludable. La limpieza regular es la clave para mantener esta atmósfera relajante. Empiece por limpiar con cuidado muebles y superficies. A continuación, aborda el suelo, barriéndolo y luego lavándolo, sin olvidar rincones que a menudo se pasan por alto. La cama, donde pasas mucho tiempo, requiere cuidados especiales.
Además, no te vayas objetos decorativos y la tapicería acumula polvo. Una sesión de arreglo completa completará la armonía de la habitación. ¿Lo principal? Mantenga un mantenimiento regular para garantizar un sueño reparador y un ambiente impecable. Además, este elemento de tu habitación también debe llamar tu atención cuando el ama de llaves llamó a la habitación.
Un elemento del dormitorio que a menudo se pasa por alto en la rutina de limpieza. El colchón, ese compañero de nuestras noches, suele ser el gran olvidado de nuestras rutinas de limpieza. Sin embargo, como señala Kathy Turley de Home Clean Heroes, con Terapia de apartamento es una verdadera guarida de ácaros, bacterias y células muertas, un cóctel invisible que puede desencadenar alergias y problemas respiratorios como el asma. Mientras nos encargamos de cambiar las sábanas o aspirar debajo de la cama, el colchón permanece a menudo descuidado.
Por lo tanto, el mantenimiento regular es esencial para mantener un ambiente saludable. ¿El primer paso? Desmonta la cama, muévela y limpia todo lo que la rodea. Lavar la ropa de cama a altas temperaturas, limpiar las esquinas y tratar el propio colchón. Para quitar las manchas una mezcla de vinagre blanco y agua hace maravillas. Una vez que las manchas hayan sido limpiadas y secas, una pizca de bicarbonato de sodio absorberá la humedad y neutralizará los olores desagradables.
Buenos reflejos para un dormitorio perfectamente sano. Según los expertos, se recomienda limpiar tu colchón al menos dos veces al año. Un poco de atención que marca la diferencia en la calidad y la salud de tu sueño. No dejes este centro de mesa de dormitorio a la sombra: garantiza un mantenimiento regular noches más claras.
Igualmente importantes son zonas olvidadas como los zócalos y el espacio debajo de la cama. Allí se acumula polvo sin prestarle atención. A limpieza regular de estos lugares, a menudo descuidados, contribuirá a una atmósfera más saludable.
FUENTE