El potencial productivo de la fruta de hueso, que incluye el melocotón y la nectarina, se redujo este año un 4% en Cataluña respecto a los datos de 2023, hasta alcanzar las 384.840 toneladas, un descenso provocado principalmente por la sequía y las altas temperaturas durante el año pasado.
Estos datos fueron presentados este lunes por la Asociación Catalana de Empresarios Frutícolas (Afrutat) y el Departamento de Acción por el Clima, Alimentación y Agenda Rural.
En un comunicado, Afrucat informa que el mayor descenso de la producción en el sector de la fruta de hueso se registra en Barcelona (-13%), seguida de Girona (-9%), Lleida (-4%) y Tarragona (-3%).
La provincia de Lleida concentra la mayor parte de la producción de melocotón y nectarina, con 362.360 toneladas, mientras que el resto registra cifras muy inferiores.
En 2023, la producción de fruta de hueso se recuperó tras tres años anteriores de baja producción y efectos climáticos como heladas, granizo y sequía severa, aunque este año, debido al estrés climático sobre los árboles y las altas temperaturas, las cifras se están moderando nuevamente.
A pesar de la caída de la producción, el director general de Empresas de Agroalimentación, Calidad y Gastronomía del Gobierno, Joan Gòdia, ha señalado que las cifras de 2024 son las de un año «normal», con prácticamente todo el potencial productivo catalán recuperado y actualmente sin escasez de agua.
El presidente del Comité de Piedra de Afrucat, Benjamí Ibars, vaticinó que el mercado de fruta de hueso será «fluido» porque la recogida fue temprana en Murcia, de donde es originaria parte del género, y no se solapará con la campaña catalana, que se destina a hora habitual.
