El miércoles, la presidenta del Cabildo de Tenerife, Rosa Dávila, anunció que se había llegado a un acuerdo para permitir temporalmente que los autobuses turísticos que circulan por ANA tengan una longitud de 12.2 metros, con el fin de facilitar la renovación de la flota en un plazo de cinco años hasta alcanzar los 11 metros.
Esta medida responde a una iniciativa de la isla para abordar los problemas de movilidad en la zona, y su implementación está a la espera de la resolución correspondiente de la dirección de tráfico provincial.
Durante una conferencia de prensa sobre los acuerdos del Consejo de Gobierno, Dávila mencionó que se había llevado a cabo una reunión con la DGT en los últimos días para discutir la propuesta de la isla de reducir el tamaño de los autobuses que pueden circular por ANA y Parques de Masca.
Por lo tanto, se llegó a un acuerdo con el sector para permitir, temporalmente y durante un período de cinco años, que los vehículos tengan una longitud de 12.2 metros para completar la renovación de su flota, lo que significaría autobuses de 11 metros y 10 para Masca.
Aunque la presidenta no especificó la fecha exacta de inicio de esta regulación, informó que el «acuerdo» ya se ha alcanzado, y ahora la resolución correspondería a la Dirección Provincial de Tráfico en Tenerife.