Tavares relanza Mirafiori con el 500 híbrido, pero no será hasta 2026.
Se había anunciado que el lunes habría una reunión importante entre el director general de Stellantis, Carlos Tavares, y los secretarios de los principales sindicatos del sector. La reunión tuvo consecuencias de cierta importancia, aunque no inmediatas. Confirmó los rumores del día anterior, Tavares anunció que a partir de 2026 en la planta de Mirafiori, en Turín, se producirá el nuevo Fiat 500 híbrido, mientras que en Melfi se producirá el híbrido Jeep Compass. También mencionó que habrá un nuevo modelo producido en la fábrica de Stellantis en Cassino, sin dar más detalles. Los sindicatos están medianamente satisfechos con las condiciones del plan presentado por Tavares, aunque reconocen que requiere largos tiempos de implementación y que a corto y medio plazo la situación sigue siendo difícil, con el riesgo de grandes sacrificios para los trabajadores.
EL NUEVO 500 HÍBRIDO HACE MILAGROS JUNTO A LA ELECTRICIDAD
El cambio de rumbo de Stellantis, que parecía haber descartado la idea de un nuevo híbrido 500 después del cierre de la producción en Tychy, se debe, como mencionó Tavares, a las tendencias de electrificación inciertas. El coche eléctrico no se está popularizando como se esperaba y el nuevo Parlamento Europeo que se elegirá en junio podría cuestionar el cambio para 2035. Por eso han decidido volver al híbrido, destinando el futuro 500 a Mirafiori, donde ya se produce el 500 eléctrico, y lanzando una nueva versión híbrida del Jeep Compass en la planta de Melfi.
Estos anuncios se suman a los recientes sobre una nueva generación de baterías para el Fiat 500e y la expansión industrial del Fiat Panda híbrido en Pomigliano. Según la empresa, la producción de estos nuevos modelos híbridos contribuirá de manera positiva a la carga de trabajo de las plantas de Termoli y Mirafiori e-DCT, así como a los sistemas de transmisión en los próximos años. Al mismo tiempo, Stellantis tiene la intención de iniciar un proceso de renovación de la plantilla, con la contratación de trabajadores jóvenes, especialmente en Mirafiori.
TAVARES: ¿1 MILLÓN DE VEHÍCULOS EN ITALIA? NECESITAMOS UN ENTORNO EMPRESARIAL FAVORABLE
Respecto a la petición del Gobierno de volver a producir al menos 1 millón de vehículos en Italia para 2030, Tavares afirmó que es una ambición común, pero que el grupo necesita un entorno empresarial favorable, actualmente condicionado por las incertidumbres de la electrificación y la fuerte competencia con nuevos actores en el mercado, como los chinos. Stellantis ya está trabajando en factores internos, pero aún quedan cuestiones externas por abordar, como el costo de la energía, la red de carga para vehículos eléctricos y herramientas de apoyo al mercado, así como actividades para fomentar la conversión y el reciclaje. En relación a las «herramientas de apoyo al mercado» mencionadas por Tavares, en unos días comenzarán los nuevos incentivos al automóvil 2024 que teóricamente impulsarán el mercado eléctrico, con consecuencias positivas en la capacidad de producción. Veremos si realmente algo cambia.
PLAN STELLANTIS PARA ITALIA: REACCIONES DE LOS SINDICATOS
Los representantes sindicales del sector automotriz recibieron con satisfacción moderada los proyectos para Italia presentados por Tavares, pero señalaron que aún quedan muchas cuestiones críticas por resolver. Por ejemplo, Rocco Palombella y Gianluca Ficco, secretario general y jefe del sector automotriz de Uilm, mencionaron que el plan presentado por Tavares implica largos tiempos de producción y posibles sacrificios para los trabajadores. También destacaron la necesidad de abordar el relanzamiento de la marca Maserati y la fábrica de Módena. Por su parte, el secretario general de Fim Cisl, Ferdinando Uliano, solicitó una reunión con las instituciones para finalizar un acuerdo de desarrollo con garantías para la industria y componentes relacionados, así como incentivos para el proceso de reindustrialización del sector.
Samuele Lodi, secretario nacional de Fiom Cgil y responsable del sector de movilidad, mencionó que surgieron aspectos positivos de la reunión con Tavares, pero aún hay incertidumbre en términos de producción. Destacó que Mirafiori tendrá que esperar hasta 2026 y que la situación es difícil, sin respuestas claras sobre I+D en Turín. Finalmente, Roberto Di Maulo, presidente de Fismici Confsa, reiteró la necesidad de un debate que incluya al Gobierno, Stellantis, sindicatos, asociaciones sectoriales y autoridades locales para acompañar los esfuerzos de inversión de la empresa.
