Residuo vegetal: aliado contra el moho en el huerto.
¿Por qué es efectiva la piel de cebolla?
La piel de cebolla es rica en compuestos antifúngicos y antibacterianos, lo que la hace particularmente eficaz contra enfermedades como el mildiú, el mildiú polvoriento y la roya. También contiene antioxidantes y nutrientes que fortalecen las plantas, ayudándolas a resistir mejor las infecciones.
¿Cómo preparar tu maceración de cebolla?
Aquí tienes una receta sencilla para hacer un macerado de cáscara de cebolla para utilizarlo como tratamiento fungicida:
- Ingredientes:
- 100 gramos de pieles de cebolla (cortarlas para que suelten más compuestos activos)
- 1 litro de agua
Pasos:
- Maceración : Mezclar la cáscara de cebolla picada con agua en un recipiente cerrado. Deja macerar todo durante 24 horas.
- Filtración : Cuela la mezcla para conservar solo el líquido.
- Dilución : Antes de su uso, diluir el macerado añadiendo 10 cl de este líquido a 1 litro de agua.
¿Cómo se utiliza este tratamiento?
- Pulverización : Utilice un pulverizador para aplicar la solución diluida directamente sobre las hojas de sus plantas. Este tratamiento es especialmente útil cuando el clima es húmedo, ya que es aquí donde prosperan los hongos. Rocíe una vez a la semana como prevención o con más frecuencia si sus plantas ya muestran signos de infección.
Precauciones a tomar
Este tratamiento natural es poderoso, pero como cualquier remedio, debe usarse con precaución. Aplicar preferentemente por la mañana o al final del día, cuando las temperaturas sean más frescas, para evitar estresar las plantas con un tratamiento a pleno sol.
Al adoptar este método, no sólo podrá reducir el uso de productos químicos en su jardín, sino también dar una segunda vida a unos residuos de cocina que a menudo se descuidan. Así que la próxima vez que peles una cebolla, ¡recuerda guardar la piel para proteger tus plantas!