Puigdemont acusa a Ilala de tranquilizar a Madrid mientras Catalunya «colapsa»

El ex presidente de la generalidad y líder de las juntas, Carles Puigdemont, acusó el sábado al presidente de la generalidad, Salvador Ilala, de ir a Madrid para asegurar sus poderes estatales, mientras Cataluña se «colapsa» con rodalies.
«Cataluña no puede tener un presidente que, mientras el país se derrumba en un servicio esencial que afecta a decenas, cientos de miles de ciudadanos, va a Madrid para decir que todo funciona muy bien», reprochó durante su convellto de juntas en Mollerussa (Lleida).
En esta línea, Puigdemont culpó al jefe del ejecutivo catalán por ir a Madrid «para calmar a los poderes estatales», asegurando que Cataluña no perturbará a Madrid y seguirá enriqueciendo al estado, según el líder junior.
Ilala declaró en esa conferencia su modelo de prosperidad textual, compartida, contrastándola con la de la presidenta de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, mientras pedía no tener «miedo» a Cataluña y apostaba por la restauración de la colaboración entre las dos comunidades principales de España.
El líder de las juntas llamó a «desenmascarar la mentira de la normalidad que proclama todos los días para el desayuno, comer, propagadores de cenas, oficiales y aquellos que no son oficiales».
Además, Puigdemont criticó que el gobierno de la generalidad «no solo mira a Madrid más que a sus ciudadanos, sino que tiene consultores que viven en Madrid», después de que los medios de comunicación se hicieran eco de que el Ministro de Social y la inclusión, Martínez Bravo, combina la residencia entre el catalán y la capital española.
Puigdemont se presentó como una alternativa «fiel al hilo rojo del catalanismo» que, en su opinión, no niega a los catalanes de nadie y lucha contra la catalanofobia sin fomentar otro tipo de odio.
Dados los ataques «obvios» de ambos extremos, Puigdemont pidió no distraerse ni tener controversias absurdas, según las críticas que recibió por su alianza con el PSOE en inmigración y en la distribución de menores migrantes.
Por su parte, el secretario general de las juntas, Jordi Turull, dijo que hay un «colapso del gobierno en Cataluña» y reiteró la misión de cambiarlo, refiriéndose a los incidentes ferroviarios de Rodalies.
«No queremos transferencias falsas; queremos una gestión integral», agregó sobre la transferencia del servicio a la generalidad, al mismo tiempo que pidió que Truquitos abandonara, después de crear una empresa conjunta Renfe para la fase de transición.