Puente pide dimisión del jefe de gabinete de Ayuso por trabajar para un particular.
El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, llamó «delincuente» a Miguel Ángel Rodríguez, jefe de gabinete de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y pidió la renuncia del Partido Popular por defender a «un individuo» y por la «falsificación de los hechos».
Esto lo afirmó en declaraciones a los medios este jueves antes de asistir a un desayuno informativo en el Fórum Nueva Economía, donde calificó al jefe de gabinete de Ayuso como un «delincuente condenado por sentencia firme» después de que el miércoles dijera en la puerta del Tribunal Supremo que el caso del fiscal general del estado, Álvaro García Ortiz, seguirá «adelante».
«Yo ya conocía su historia, ayer salió diciendo que el fiscal general del estado debe seguir adelante y a mí, desde la perspectiva de un hombre de derecho como yo, ver a un criminal condenado por sentencia firme diciendo que el fiscal general del estado, que es el que persigue a los delincuentes, tiene que seguir adelante, francamente, me estaba muriendo», dijo Puente.
En este sentido, criticó que Rodríguez, en su posición de jefe de gabinete de Ayuso, «se inmiscuya en los asuntos de un particular» aunque «era un secreto a voces» y le parece «muy grave» que en una «democracia sana» no renuncie.
Lamentó además que García Ortiz «está siendo perseguido injustamente» por «simplemente intentar contrarrestar una mentira y una filtración previa» y destacó que le parece «inconcebible» que Rodríguez «trabaje para un mero particular, que no tiene audiencia ni connotación política».
Con ello, indicó que no sabe «hasta dónde está dispuesto a llegar el PP desde el punto de vista jurídico» y que la «gente» está «mirando» a los asesores de algunos cercanos al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
«Ayer quedó absolutamente claro que alguien había cometido un delito y que las instituciones intentaron ayudarle», añadió, en referencia a los dos delitos admitidos por el novio de Ayuso, Alberto González Amador. Según el ministro, se intentó defenderlo «falsificando la realidad y filtrando correos electrónicos».
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