El jueves, cientos de mototaxis protestaron pacíficamente frente al Congreso en la capital de Perú, exigiendo leyes efectivas contra el crimen. Esto ocurre en medio de un aumento de la extorsión en el país y después de que al menos 15 mototaxis fueran asesinados en Lima desde agosto.
Edwin Casas, líder de un sindicato de mototaxis en los suburbios del este de Lima, expresó: «Las leyes favorecen el crimen, ya estamos hartos de las extorsiones y las muertes». Casas mantiene a sus dos hijos adolescentes y a su anciana madre con su trabajo diario.
Una pancarta llevada por el grupo resumía sus quejas. «Hoy aparecen nuevas formas de extorsión, como el cobro diario de dinero en paradas autorizadas. Para la policía, cobrar un sol (27 centavos) es un pago ridículo, el problema es que si te niegas a pagar ese sol te matan», decía la pancarta que mostraba una imagen de una mano sosteniendo un arma.
Enfrentándose a una barrera policial que los separaba del Congreso, Casas dijo a La prensa asociada que los mototaxis están desprotegidos. «Es irónico. Cuando protestamos siempre hay mucha policía, pero cuando nos necesitamos, no hay nadie que nos proteja», señaló.
El dirigente recordó que desde agosto, al menos 15 mototaxistas han sido asesinados en Lima. Todos estos incidentes ocurrieron en barrios periféricos donde la presencia policial es limitada. No se sabe cuántos mototaxis hay en Perú debido a que es un trabajo mayoritariamente informal.
La extorsión se ha quintuplicado en Perú entre 2021 y 2023. El primer ministro Gustavo Adrianzén admitió que la delincuencia «en algunas ciudades supera la capacidad de afrontarla» y que «muchas de las extorsiones provienen de algunas cárceles».