Protege tu jardín o terraza con alarmas antirrobo y videovigilancia
En los últimos años ha habido un aumento en los robos en hogares, especialmente en las grandes ciudades metropolitanas.
Este fenómeno ha llevado a más personas a buscar soluciones de seguridad para proteger no solo el interior de sus hogares, sino también espacios exteriores como jardines y grandes terrazas que representan puntos vulnerables de acceso.
En particular, los jardines, especialmente los grandes, ofrecen numerosos puntos de acceso para intrusos, como cancelas, setos bajos, mientras que las terrazas pueden ser alcanzadas con relativa facilidad desde los techos o escalando.
En todos estos casos, para protegerte, puedes considerar la instalación de sistemas de videovigilancia y dispositivos antirrobo para espacios exteriores.
La videovigilancia exterior es un excelente disuasivo de robos. La presencia de cámaras puede disuadir a los intrusos de intentar entrar a la vivienda; además, en caso de intrusión, estos dispositivos permiten grabar todo lo que sucede, proporcionando elementos útiles a las autoridades de forma clara y respetando la legislación vigente.
Las cámaras de vigilancia diseñadas para espacios exteriores suelen ser resistentes a la intemperie y equipadas con funciones avanzadas como visión nocturna, lo que garantiza una vigilancia continua incluso de noche o en condiciones de poca luz. Es recomendable colocarlas en puntos estratégicos del jardín o terraza para vigilar los principales accesos.
En cuanto a los modelos disponibles en el mercado, además de las soluciones tradicionales cableadas, también se pueden encontrar cámaras wifi. Estos modernos sistemas permiten monitorear en tiempo real el jardín o la terraza directamente desde un teléfono inteligente o computadora, gracias a la conexión de red. Esto significa que incluso estando lejos de casa, es posible verificar de inmediato lo que está ocurriendo y reaccionar rápidamente ante una intrusión.
Es importante recordar que la presencia de un sistema de videovigilancia debe estar debidamente señalizada, y que las cámaras deben ser colocadas respetando la legislación regulada por el Garante de Protección de Datos Personales.
Las alarmas exteriores están diseñadas para monitorear y proteger áreas como jardines y patios detectando movimientos sospechosos y activando alarmas en caso de intrusión.
Estos sistemas, conocidos como alarmas perimetrales, constan generalmente de una unidad de control de alarma, sensores de detección y módulos de comunicación wifi en el caso de los modelos inalámbricos. Además, pueden incluir una sirena y luces brillantes que se activan al detectar una intrusión.
En términos de sensores, los sistemas más avanzados pueden equiparse con dispositivos electrónicos que detectan, mediante rayos infrarrojos, los movimientos dentro del área monitoreada. Estos sensores suelen ser inmunes a las mascotas, lo que significa que pueden distinguirlas y no activarse erróneamente.
Una vez que el sistema de seguridad esté instalado, es importante garantizar que funcione de manera óptima a lo largo del tiempo mediante un mantenimiento regular.
Los sensores de movimiento y perimetrales deben ser revisados periódicamente para evitar falsas alarmas o fallas. En caso de un sensor defectuoso, es recomendable reemplazarlo o solicitar evaluación de un profesional. También es importante mantener limpios y correctamente conectados los sensores y las cámaras.
Además, muchos sistemas de videovigilancia ofrecen actualizaciones de software que mejoran el rendimiento y la seguridad frente a vulnerabilidades de IT, asegurando la máxima protección del jardín o terraza.
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