Preocupación en central nuclear de Zaporizhzhia por escalada
La seguridad de la central nuclear más grande de Europa se está deteriorando, según la Agencia Internacional de Energía Atómica (OIEA), lo que podría provocar un desastre nuclear.
Zaporizhzhia, en el sureste de Ucrania, ha estado bajo control ruso desde poco después de que la nación lanzara una invasión a gran escala de su vecino en febrero de 2022. El sábado, un ataque con drones impactó en una vía de acceso al perímetro utilizado por el personal cercano a la fábrica. El director general de la OIEA, Rafael Mariano Grossi, confirmó a la agencia estatal de noticias rusa TASS que los peritos presentes en el lugar fueron informados de la detonación y de inmediato acudieron a la zona.
Poco después del ataque, Rusia acusó a Ucrania de dejar caer la carga explosiva cerca de la fábrica. Zaporizhzhia ha sido blanco de repetidos ataques desde el comienzo del conflicto, de los que ambas partes se culpan mutuamente.
Mientras la planta está inactiva, Rusia y Ucrania han entablado una guerra de palabras sobre su existencia misma, alegando que su enemigo está tratando de sabotear su operación y poner en peligro la seguridad a su alrededor. En un comunicado, Grossi dijo: “Una vez más somos testigos de crecientes riesgos para la seguridad nuclear con los que se enfrenta la planta”.
Aparentemente, el lugar del impacto estaba muy cerca de estanques críticos de pulverización de agua de refrigeración y a solo 100 metros de la línea eléctrica de Dniprovska, la única línea de 750 kilovoltios que todavía suministra energía a la planta. El equipo de la OIEA que visitó la zona el sábado dijo que los daños parecían haber sido causados por un dron equipado con una carga explosiva.
Aunque el informe confirma que no hubo víctimas ni daños apreciables en el equipamiento de la central nuclear, hubo daños evidentes en la carretera que conecta las dos puertas principales de Zaporizhzhia. La preocupante situación de seguridad en la planta se produce mientras Ucrania continúa su incursión en Rusia. Las autoridades dicen que han tomado el control de unos 82 asentamientos en un área de 1.150 kilómetros cuadrados en la región de Kursk desde el 6 de agosto. Moscú está dispuesta a hablar sobre el aparente ataque en la planta de Zaporizhia con la OIEA, según Roman Ustinov, representante interino de Rusia en Viena.
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