Origen del Parkinson: investigaciones revelan conexión con intestino
(Adnkronos) – Nueva evidencia sugiere que la enfermedad de Parkinson se origina en el intestino, no en el cerebro. Un estudio publicado en «Jama Network Open» por el Centro Médico Beth Israel Deaconess revela esta teoría. Las investigaciones anteriores ya habían señalado al intestino como el órgano de inicio de enfermedades neurodegenerativas, y ahora este nuevo estudio refuerza esta hipótesis. Se ha observado que los problemas gastrointestinales son comunes en pacientes con trastornos neurodegenerativos, e incluso se ha llegado a pensar que el síndrome del intestino irritable afecta a quienes viven en centros de salud mental, lo que puede provocar complicaciones en la digestión de alimentos. Estos síntomas suelen aparecer hasta dos décadas antes de los síntomas motores del Parkinson, como rigidez o temblores.
«Durante mucho tiempo, se ha descrito la enfermedad de Parkinson como una enfermedad que comienza en el cerebro y se extiende hacia abajo hasta el intestino, lo cual explica por qué los pacientes tienen problemas gastrointestinales», explicó el autor Subhash Kulkarni. «Otra teoría sugiere que en muchos pacientes la vía de la enfermedad se produce desde el intestino hacia arriba, es decir, desde el intestino hasta el cerebro». El estudio encontró que las personas con afecciones gastrointestinales superiores, como úlceras u otros daños en el revestimiento del esófago y la parte superior del intestino delgado, tenían más probabilidades de desarrollar Parkinson en su vida.
Participaron en el estudio 9.350 pacientes sin diagnóstico de Parkinson, pero que se sometieron a una endoscopia (con biopsia) de la parte superior del intestino entre 2000 y 2005. La mayoría de ellos tenían entre 50 y 64 años en el momento del procedimiento. «La afectación de las mucosas (erosión, esofagitis y úlcera péptica) se asoció con un riesgo del 76% de desarrollar la enfermedad de Parkinson durante el periodo de seguimiento, con un promedio de 14,9 años por cada año de seguimiento de toda la cohorte», informa el estudio. Los investigadores enfatizan la importancia de la prevención, recomendando que las personas con antecedentes de daños graves en las mucosas del intestino superior sean seguidas de cerca a lo largo de los años para detectar los primeros signos de la enfermedad de Parkinson. —[email protected] (Información web)