Nuevos espacios en Logroño para la Zona de Bajas Emisiones
La Zona de Bajas Emisiones (ZBE) de Logroño abarcará el espacio delimitado al norte por la calle Madre de Dios, al este por Luis de Ulloa, al sur por la Avenida de la Paz y al oeste por Doce Ligero. La decisión se tomó en base a los aportes recopilados en el análisis de la asistencia técnica contratada, que está finalizando el proyecto de implementación de la ZBE y la ordenanza que la regulará.
Se prevé que el documento final pueda ser analizado por el Consejo de Gobierno en enero y luego definitivamente en el pleno para entrar en vigor en enero de 2026. Según los concejales Íñigo López-Araquistáin y Ángel Andrés, la zona se implementará de forma gradual y se evaluarán continuamente las medidas que se apliquen.
En los últimos meses, la UTE integrada por las empresas Tema Ingeniería e iPlan llevó a cabo una asistencia técnica analizando la situación de la ciudad y realizando un proceso participativo para el análisis inicial y la elaboración del proyecto ZBE y la ordenanza. Los datos confirman que Logroño tiene un buen nivel de calidad del aire, aunque el objetivo es seguir implementando medidas para mejorarla, dentro de la estrategia Ciudad Circular.
La previsión es que el Proyecto de Ordenanza pueda ser aprobado por el Consejo de Administración Local en la segunda quincena de enero y enviado al Pleno para su aprobación inicial. Posteriormente se abrirá un plazo para presentar alegaciones y realizar cambios si es necesario. El calendario apunta a la entrada en vigor de la ZBE Logroño en enero de 2026.
El concejal de Movilidad, Ángel Andrés, detalló las condiciones de acceso a la ZBE en la fase inicial, donde tendrán acceso los vehículos con etiqueta ambiental: categorías 0 emisiones, ECO, C y B. Solo los vehículos sin etiqueta ambiental tendrán restricciones de acceso en esa etapa inicial. Esta fase se ampliará hasta 3 años después de la entrada en vigor, momento en el que se redefinirán las condiciones.
Se realizaron encuestas para evaluar la percepción de la población sobre la implementación de la ZBE, con resultados positivos en cuanto a la calidad de vida y medio ambiente. Además, se promovió la participación ciudadana a través de sesiones informativas y solicitudes de aportes para la elaboración de proyectos y ordenanzas de la ZBE.
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