La Editorial Acantilado ha publicado una nueva traducción al español de la obra renacentista «Jerusalén liberada» de Torquato Tasso (1544-1595), de José María Micó, la primera en una versión «poética completa» de la obra desde 1886, explicó. este miércoles en rueda de prensa el poeta y traductor.
Micó afirmó que se trata de una obra que necesita una traducción moderna y con voluntad poética, y añadió que se trata de «un logro personal y una novedad importante» en el panorama editorial, ya que ahora era muy difícil encontrar una edición en español.
La obra, publicada en 1581, tuvo traducciones contemporáneas, en los siglos XVII y XVIII quedó en el olvido, reapareció en romance y en el siglo XIX hubo varias en prosa y verso, siendo la última en octavas la realizada por el mexicano. Francico Gómez de la Palat en 1886, y Micó añadió que en los años 30 y 40 del siglo XX se hicieron versiones escolares en prosa reducida.
Micó afirmó que «Jerusalén liberada», poema épico sobre la conquista cristiana de Jerusalén durante la Primera Cruzada, es uno de los grandes clásicos de la literatura universal que no tuvo una traducción al español moderno: «Sentí la necesidad de que se tradujera «, añadió.
El poeta y traductor consideró a Tasso el escritor europeo más importante de la segunda mitad del siglo XVI, así como una de las mentes más lúcidas, que se convirtió en lectura de referencia para autores contemporáneos como William Shakespeare, Miguel de Cervantes o Lope de Vega. . y para los románticos posteriores que vieron en él la personificación del «genio literario».
Micó sostuvo que Tasso pretendía con «Jerusalén liberada» representar «la pesada tragedia del ser humano», una obra que contiene lo mejor de la poesía, pero también de la novela histórica y de aventuras, y que en la nueva traducción aparece también con el texto en italiano.
Afirmó que Tasso representó al autor «superado por su propio genio cuya obra capital comenzó a circular sin su consentimiento» cuando fue hospitalizado en prisión, aspecto que se ve en el título del cual el poeta, según el traductor, probablemente había el puesto «Goffredo».
Respecto a la traducción, Micó defendió la máxima «traducir poesía es traducir poesía» y destacó que no sólo hay que traducirla en sentido literal, sino que hay que reconstruir un valor literario y que en autores como Dante -del que tradujo- . «Divina Comedia»… o la preparación de la letra por parte de Tasso es algo que debemos conservar.
Micó explicó que en sus traducciones decide mantener la poesía, pero no necesariamente la rima, manteniendo la idea de estrofa, con asonancia en los primeros seis versos y en la conclusión: “Permite más libertad para respetar lo literal. sentido, pero lo obliga a cerrar las octavas con una asonancia», argumentó.
El traductor aseguró que una vez traducida «Jerusalén liberada», «habría que traducir la poesía lírica de Tasso», compuesta por 1.700 composiciones, una de las producciones más extensas de su época.
La editora de Acantilado, Sandra Ollo, celebró la nueva traducción íntegra de esta «joya literaria», que consideró un libro fundamental para entender una parte de la cultura europea, y subrayó la voluntad del sello con obras como ésta o «Divina Comedia» acercar grandes obras de la literatura al público en general.