Miles de personas se reunieron después de la convocatoria, la manifestación fue convocada desde la fábrica de Bridgestone en Puente San Miguel en la plaza del Consejo Local de Torrelavega, coincidiendo con la primera huelga general, convocada por la fábrica debido al expediente de regulación de empleo anunciado por la compañía, que afecta a 211 trabajadores en Cantabria y 335 en Basauri, en el País Vasco.
Alrededor de 2.000 personas se unieron a principios de marzo, saliendo alrededor de las 6 de la tarde y sumando más participantes a lo largo de la ruta. Mayoritariamente eran trabajadores con sus familias, con muchos niños presentes y marchando frente a una pancarta con el lema «en Bridgestone nadie se queda atrás, no hay soluciones».
Entre los presentes se encontraban el alcalde de Torrelavega, Javier López Estrada, y el alcalde de Reocín, Pablo Diestro, así como el exconsejero de Industria, Javier López Marcano, todos vistiendo camisetas de la fábrica.
Además, el alcalde de Cartes, Agustín Molleda, se sumó a la manifestación junto a representantes de diferentes partidos políticos para mostrar su apoyo a los trabajadores afectados en la región de Besaya, junto con diputados y concejales de varios municipios.
Los manifestantes iniciaron su recorrido con otra pancarta que decía «no al despido», y entre silbatos, altavoces, humo de colores y petardos, aumentaron la intensidad de su protesta mientras se acercaban al centro de Torrelavega.
Después, muchos transeúntes se detuvieron a observar la marcha desde ambos lados de la acera o se unieron a ella, lo que provocó el corte de la calle.
