La OTAN en el ‘momento Churchill’ con Rusia tras invasión de Ucrania: Digenpol.
El teniente general Fernando López del Pozo, director general de Política de Defensa (Digenpol), afirmó este miércoles que la OTAN se encuentra actualmente en un «momento Churchill» respecto a Rusia tras la invasión de Ucrania. «Está claro, nos despertamos», añadió.
Así lo afirmó en su intervención en el XXXVI Seminario de Seguridad y Defensa en la presentación “La OTAN 75 años después: del Atlántico Norte, al mapa mundial; de armas nucleares, a los hutíes, a la que también asistió la coordinadora del programa de la oficina de diplomacia pública de la OTAN, Paula Redondo.
López del Pozo se pronunció así después de que el moderador, el redactor jefe de El Periódico de Catalunya, Juanjo Fernández, preguntara a los ponentes sobre el dilema que plantea el Alto Representante de la UE para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, ante el conflicto en Ucrania, donde preguntó si Europa estaba viviendo un momento Churchill o un momento Chamberlain.
Borrel se refirió así a la política de tranquilidad que defendió el primer ministro inglés Arthur Neville Chamberlain contra el Tercer Reich, a las puertas de la Segunda Guerra Mundial; mientras que Winston Churchill, que le sucedió en el cargo, defendía una política de disuasión hacia Adolf Hitler.
En este sentido, Digenpol revisó en primer lugar las relaciones entre la OTAN y Rusia que se remontan a 1997, donde las relaciones entre ambas partes estaban «en el camino correcto del diálogo». «Un camino que avanza hasta 2008, cuando se produce la invasión de Georgia y hay señales muy claras de que las cosas no van bien».
Hasta entonces, señaló, la alianza se encontraba en un «momento cameliano» pues lo que buscaba era armonía y tranquilidad. «En otras palabras, calmar a la bestia», afirmó, añadiendo que en 2014 Rusia anexó Crimea en una guerra «híbrida y sutil» que no logró provocar una reacción, que calificó de «Camelot total».
Sin embargo, admitió que en el momento actual, con el conflicto en Ucrania, la situación se encuentra «claramente» en un «momento Churchill», lo que no le ha impedido abogar por la concordia en esta situación para defender que no está en contra de la disuasión.
«La armonía es ni más ni menos que creer que Putin pasará y Rusia seguirá ahí, como todos sabemos».
Para López del Pozo hay ciertos puentes que no se deben romper y hay que seguir intentando comunicar con el pueblo ruso para decirle que la OTAN no es expansiva. «Él tiene una política de puertas abiertas que dice: si quieres venir y cumplir las condiciones, te aceptaremos. Pero no iremos a por ti».
A nivel mundial, y más allá de Rusia, Digenpol ha optado por seguir una política donde prevalezcan «la armonía y el equilibrio» frente a las amenazas a la alianza atlántica. «Es muy fácil de decir, aunque muy complicado, pero es sin duda la solución que busca España con su política de defensa».
En su discurso con motivo de los 75 años de la OTAN, el director general de Política de Defensa destacó la «solidaridad» y la «fortaleza» que tiene la Alianza Atlántica gracias al esfuerzo de solidaridad entre sus miembros.
Según señaló, la unión se construye sólo a través de la solidaridad, lo que significa que en algún momento cada país tiene que preocuparse por defender a sus aliados en lugares que no son de su principal interés, por si luego necesitará que el resto llegue hasta él. . su ayuda. «Sigue siendo un principio básico de la relación entre naciones porque es la única manera de lograr ese ‘yin y yang’ del que hablamos».
A esto añadió que la OTAN ofrece una fuerza «incomparable» en el mundo, que se ha manifestado en los últimos 30 años en los que se ha duplicado el número de países que se han convertido en aliados. «Tenemos el ejemplo de Finlandia y tenemos el ejemplo de Suecia, muy recientemente y de forma muy obvia».
También defendió la flexibilidad de la alianza que permite a los aliados más pequeños sentirse «cómodos» porque son consultados, porque las decisiones se toman por consenso, por lo que tienen la tranquilidad de que no se hará algo «pasándolos por encima». Cabezas.».
Finalmente, sobre el futuro de la OTAN, Digenpol indicó que «todo hace pensar» que tiene capacidad de adaptación y que cumplirá su «verdadera» función si es fiel a su ADN y a aquello para lo que está diseñada, como aumentar la seguridad. aliados para disuadir cualquier tipo de agresión para preservar el modo de vida de los países que lo integran.
Por su parte, la coordinadora del programa de la oficina de diplomacia pública de la OTAN también empezó a responder a la pregunta de si la alianza está en un momento Chamberlain o Churchill para fingir que ella también se decanta por este último. «Tomamos la decisión de apoyar a Ucrania, no de ir a la guerra, y ahora no es el momento de dar marcha atrás».
Respecto a los 75 años de la OTAN, destacó que durante este período la alianza trabajó por la paz y la seguridad. «Lo que estamos haciendo es celebrar la libertad de los países de unirse a una organización que los proteja», afirmó, a diferencia de Rusia, que no reconoce la capacidad de Ucrania para tomar decisiones independientes en materia de política exterior.
Se refirió a la próxima cumbre de la OTAN que se celebrará en Washington, ciudad donde se firmó el tratado que vio nacer la alianza y donde se abordará la disuasión y la defensa. «Sólo podemos evitar la guerra si tenemos un elemento disuasorio muy fuerte, y este es también el mensaje que debemos enviar a Rusia y al presidente Putin».
El segundo tema a discutir será el apoyo brindado a Ucrania por los aliados en un esfuerzo militar sin precedentes. Lo que permitió a los ucranianos luchar contra Rusia y defender su territorio «de los invasores rusos» para recuperar el 50 por ciento que les fue arrebatado al inicio de la invasión a gran escala.
Por último, se abordará un marco financiero a largo plazo para comunicar el compromiso de los aliados con Ucrania, evitando lagunas, así como «déficits y retrasos» en la provisión de este suministro de seguridad. «Un sistema donde los aliados, liderados por la OTAN, puedan coordinar esta asistencia, tanto militar como de entrenamiento para el ejército ucraniano».
«Por lo tanto, esperamos que en la cumbre de Washington se pueda lanzar esta iniciativa y que los aliados puedan acordar que la OTAN lidere esta coordinación y la prestación de asistencia de seguridad y formación a Ucrania. Y un compromiso financiero plurianual que también puso sobre la mesa el secretario general de la OTAN”, concluyó.
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