La igualación de la recaudación de la cuota catalana llevará años para el Estado.
El catedrático de Economía Aplicada e investigador principal del centro de estudios Funcas, Desiderio Romero, advirtió que con la cuota catalana acordada entre el PSC y ERC, las administraciones tendrán que hacer importantes reformas fiscales que afectarán a todos los ingresos, ya que el Estado No se podría recaudar la misma cantidad que ahora en el corto plazo.
Este profesor asume que el volumen de recursos con el que Cataluña aporta actualmente a las arcas públicas es «muy grande», entre 22.000 y 30.000 millones según distintos autores, explicó en declaraciones a Prensa Europea.
«Así que, si finalmente se aprueba este acuerdo, y si las comunidades autónomas que permanecen en el régimen común quieren mantener el mismo nivel de servicios, tendrán que reducir el gasto o aumentar los impuestos en esos territorios», ha advertido.
El economista subrayó que «no hay muchas posibilidades» de aumentar un volumen tan «grande» de impuestos, señalando que si el Gobierno decidiera, por ejemplo, eliminar los dos tipos reducidos del IVA y aumentarlos al 21 por ciento, eso sería él. significa recaudar alrededor de 15.000 millones de rupias.
Tampoco se conseguiría, a su juicio, con el aumento del último tramo del impuesto estatal sobre la renta de las personas físicas, que se aplica a las bases imponibles superiores a 300.000 euros, ni con el anuncio del Gobierno de que duplicará la cantidad que aporta a dicho impuesto. – el llamado Fondo de Compensación Interterritorial.
Romero ha señalado que en los últimos años el Fondo de Compensación ha tenido un volumen inferior a los 450 millones de euros anuales, una «cantidad pequeña» que «no cubre las necesidades». “La idea de utilizar ese fondo no es la más operativa”, consideró.
En su opinión, para que el Fondo de Compensación tenga fondos suficientes, se deberían tomar medidas fiscales mucho más ambiciosas y la posibilidad de que el Gobierno intervenga en las categorías de ingresos de la clase media, de donde proviene la mayor parte de los ingresos. «Si se aumenta el impuesto sobre la renta personal, se afectaría a todo tipo de familias», afirmó.
Ha indicado que si el Estado deja de recaudar más de 20.000 millones por la salida de Cataluña del régimen común, «los impuestos no se pueden incrementar en ese valor en el corto plazo»: «Es inasumible, ni en dos ni en tres años». puedes aumentar la recaudación de dinero de una forma tan importante que es muy complicado.
Romero amplía estas ideas en un artículo reciente para Funcas, en el que pone el foco en el «impasse» en el que se encuentra la aprobación de los nuevos presupuestos generales del Estado debido al debate que subyace a la financiación de Cataluña.
En el artículo, el economista señala que, de aprobarse la financiación única catalana, «está claro que serán necesarias reformas fiscales de alto impacto y difíciles de aplicar en el corto plazo».
Cree que Cataluña adquiriría un «estatus similar» a los acuerdos vigentes en el País Vasco y Navarra, lo que «generará perdedores, especialmente en regiones que, como Andalucía, Valencia o Murcia, llevan años luchando con problemas de infrafinanciación». por el fracaso de la reforma del régimen común pendiente de la resolución de 2014.
«La aprobación de un acuerdo tendría efectos negativos en la solidaridad interregional entre el resto de comunidades autónomas, dejando al Gobierno central con menos recursos para distribuir entre las comunidades autónomas», apunta.
En cualquier caso, el investigador señala que el impacto preciso sobre los ingresos tributarios de una posible salida del régimen común dependerá de los términos y condiciones concretos que se acuerden, ya que «todavía no se han hecho públicos», ni de cómo se haga en Cataluña. pagará los servicios que el Estado presta en la comunidad, ni cómo contribuirá Cataluña al llamado mecanismo de solidaridad interterritorial.
Además, también señala que una agencia tributaria catalana propia tendrá «efectos directos en los esfuerzos de control del fraude a nivel nacional», en función del nivel de colaboración de la autoridad catalana con la Agencia Tributaria Estatal.
