La Guardia Civil, Salvamento Marítimo y Cruz Roja están trabajando desde la tarde del viernes en el Sur del Golfo de Ceuta en busca de un menor migrante que fue arrojado al mar desde una moto de agua.
El piloto de la embarcación, junto con un segundo implicado que transportaba a otra víctima, fueron interceptados por la Armada marroquí cuando huían hacia Marruecos.
Sobre las 20.00 horas del viernes, el Centro de Servicios Operativos (COS) de Ceuta anunció que dos aviones se dirigían a Ceuta desde Marruecos a través del Golfo Sur, según pudo saber Europa Press.
El Servicio Marítimo (Semar) de la Guardia Civil procedió al seguimiento de las dos embarcaciones que, tras ser detectadas, decidieron dar media vuelta y regresar a las costas marroquíes.
Durante la persecución de la embarcación de la Semar, uno de los pilotos arrojó al mar a la persona que supuestamente intentaba cruzar irregularmente a España.
Al llegar a aguas marroquíes, tras escapar de los agentes españoles, la patrullera de la Marina Real de Marruecos logró detener a los dos pilotos y al menor que aún se encontraba en la moto de agua, quedando el otro en paradero desconocido.
Automáticamente se activó el protocolo de búsqueda con Salvamar Atria de Salvamento Marítimo y una embarcación de la Cruz Roja del Mar Semarul de la Guardia Civil estuvo toda la noche explorando el Golfo Sur de punta a punta.
A primera hora de la mañana también se activó desde Rota un helicóptero de la Benemérita que apoya las operaciones aéreas asistido por un dron equipado con una cámara térmica.
El dispositivo permaneció activo este sábado por la mañana y el mediodía.
La Guardia Civil, Salvamento Marítimo y Cruz Roja continuaron la persecución, alcanzando hasta 5 millas de la orilla.
Contaron con el apoyo del helicóptero de salvamento marítimo SAR Aircraft, que sobrevoló la zona hasta pasadas las 15.00 horas, cuando Salvamar Atria también cesó su actividad, regresando al puerto.