Jóvenes cordobeses conservan el pinsapo en Sierra de Líjar

Jóvenes cordobeses conservan el pinsapo en Sierra de Líjar

Según la definición de la FAO, la gestión forestal es un proceso de planificación e implementación de prácticas para la gestión y buen uso de los bosques y otras tierras boscosas, que tiene como objetivo alcanzar objetivos ambientales, culturales, económicos y sociales específicos.

La reforestación implica repoblar áreas deforestadas para recuperar bosques que han sido destruidos en el pasado reciente. Considerando la pérdida de grandes masas de bosque, que son vitales para la lucha contra el cambio climático, la absorción de CO2 y la generación de oxígeno, se requiere una plantación masiva de nuevos árboles.

En un esfuerzo por preservar el patrimonio natural de Andalucía, un grupo de estudiantes del Ciclo Formativo de Grado Medio en Aprovechamiento y Conservación del Medio Natural y del Grado Superior en Montes y Gestión del Medio Natural del IES Aljanadic de Posadas, Córdoba, participó activamente en la plantación de más de 200 ejemplares de pinsapo (Abies Pinsapo Boiss) en Sierra de Líjar, en Algodonales, Cádiz. Esta iniciativa formativa, organizada por la Consejería de Sostenibilidad y Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, se enmarca en un ambicioso plan de recuperación de esta especie endémica y emblemática de la sierra de Andalucía.

El pinsapo, conocido por su aspecto elegante y copa piramidal, es una conífera que puede alcanzar hasta 30 metros de altura. Sus hojas, dispuestas en forma de hélice, confieren a las ramitas un característico aspecto cilíndrico. Esta especie se encuentra actualmente catalogada como «en peligro de extinción» y protegida tanto por la legislación española como andaluza. Su distribución natural se limita a las sierras de Cádiz y Málaga, como la Sierra del Pinar de Grazalema, la Sierra de las Nieves, la Sierra Bermeja o la Sierra de Líjar.

Durante la visita, los estudiantes participaron en la siembra al tiempo que recibieron formación en el ámbito de la gestión forestal que la Junta de Andalucía lleva a cabo para la conservación del pinsapo. David, uno de los estudiantes, fue el primero en plantar un ejemplar, al que llamó «Aljanadic», con la esperanza de que echara raíces y creciera con fuerza.

La elección de la Sierra de Líjar para esta plantación no fue casual. Aunque hoy en día el pinsapo se encuentra habitualmente en altitudes superiores a los 1.000 metros, la experiencia reciente ha demostrado que bajo condiciones óptimas de humedad y sombra, puede prosperar en altitudes más bajas ampliando así su potencial área de expansión. Esta adaptación amplía las posibilidades de reforestación a otras provincias andaluzas, como la Sierra del Tablón en Sevilla y la Sierra de los Filabres en Almería, donde se están evaluando nuevos parajes que cumplan con estos requisitos.

FUENTE

nuevaprensa.info

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *