Izquierdo busca reelección con la «confianza» del sindicato
Jesús Izquierdo, secretario general de UGT en La Rioja desde 2017, se presentará a la reelección en el XIV Congreso del sindicato, que tendrá lugar el 31 de enero, con la confianza de que contará con el «apoyo» de la mayoría de delegados. Ese día, según una nota de prensa, junto al secretario de organización, Álvaro Granell, están convocados 121 delegados para elegir la nueva dirección del sindicato «y decidir los retos que debe afrontar en los próximos cuatro años» bajo el lema Más y Mejor Unión. Hasta ese día, cualquier miembro y afiliado tiene una oportunidad legítima de presentar su solicitud siempre que obtenga el 25 por ciento de las aprobaciones. En cuanto a si habrá más candidatos, el actual secretario general se “mojó” al considerarlo poco probable.
Izquierdo corre «por muchos motivos» pero principalmente porque su «ilusión está intacta» y porque el equipo que le acompaña tiene, consideró, «experiencia más que suficiente para afrontar los retos». En el Congreso, anunció, propondrá fortalecer la dirección del sindicato y, «sobre todo, encomendarle tareas específicas que, por ejemplo, están relacionadas con la recuperación de la memoria democrática». «Hay que valorar el compromiso, la militancia y el buen hacer de los compañeros que durante cincuenta años han hecho posible que seamos lo que hoy somos, la principal fuerza sindical en La Rioja», afirmó. Su primera tarea será preparar la celebración de esos cincuenta años en 2027.
Reducir la jornada laboral es, para Izquierdo, uno de los principales retos. En su opinión, «el reparto del tiempo de trabajo es un reto inaplazable y los trabajadores de nuestro país queremos trabajar menos y vivir mejor, y eso sólo será posible si conseguimos reducir la jornada laboral». Respecto a los retos necesarios a abordar en La Rioja, ha apuntado al Plan de Empleo, que «hay que hacer seguimiento, actualizar y, sobre todo, dar respuestas a los 12.500 parados que aún existen». Son personas, afirmó, que «necesitan políticas activas de empleo, políticas de orientación, formación, reciclaje y, sobre todo, recolocación en puestos de trabajo en condiciones dignas».
Por ello, es necesario, consideró, «abordar» la reconversión de los trabajadores, porque las empresas «se quejan de que no encuentran mano de obra» pero «no es cierto». De este modo, «Son desempleados que necesitan formación, reciclaje y oportunidades de empleo atractivas». «Y aquí fallamos», afirmó, «son empleos que son difíciles de gestionar por falta de formación», pero también «muchas veces porque las condiciones de trabajo son muy malas, porque los salarios son muy bajos». Para Izquierdo, en cambio, «si hay una desigualdad que sigue prevaleciendo en las empresas tiene que ver con la desigualdad salarial entre hombres y mujeres, y en La Rioja el cincuenta por ciento de las empresas con obligaciones aún no tienen un plan hacia la igualdad implementado.»
Para Izquierdo, UGT sigue siendo «la primera fuerza sindical por méritos propios», aunque también reconoció: «Necesitamos modernizarnos como organización» con un discurso «creíble» que aborde «nuevas formas de trabajo» y con «competencia para abordar los nuevos desafíos que tiene el mundo del trabajo». El dirigente sindical se refirió a los «retos que UGT ha abordado» en estos cuatro años, poniendo sobre la mesa la negociación colectiva como una «prioridad». Así, citó los acuerdos comerciales y agrícolas, que se firmaron respectivamente en las últimas semanas y antes del verano, cuando uno de 2008 y otro de 2013 habían expirado. «Y eso es mérito de las federaciones que forman parte de nuestro sindicato, que abordan los desafíos que conlleva la negociación colectiva», dijo.
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