La ocupación turística de Galicia estará alrededor de la «completa» Semana Santa, si el clima lo permite. Si no, se moverá alrededor del 60 y el 75%.
Estos son los primeros pronósticos que, por el momento, administran el clúster turístico. En este momento, poco menos de dos semanas para el comienzo del período festivo, la ocupación es del 50%.
«Por lo general, es», explica el presidente del clúster, Cesáreo Pardal, a Europa Press. Señala que estas cifras se han registrado durante 10 años, porque los posibles visitantes están esperando «hasta el último momento» para reservar de acuerdo con la meteorología, que en Galicia y esta temporada está cambiando mucho.
Sin embargo, enfatiza que estas son figuras generales, a nivel regional. En lugares como Viveiro y Ferrol, con las vacaciones de la Semana Santa reconocidas como partidos de interés turístico nacional e internacional, las ocupaciones son «muy grandes», que podrían estar en plena capacidad.
En el caso de las condiciones climáticas adversas, señala, podría caer alrededor del 15%, permaneciendo completamente en cifras muy grandes. Lo mismo es cierto para el turismo rural, el otro gran activo de esta temporada y esto depende de un gran momento.
Sin embargo, Pardal insistió en que estos pronósticos son durante tres días, «no durante todo el mes». «Como siempre, parece que nos convertimos en oro. Y no. Estos pronósticos son durante tres días, no durante todo el mes», aclara, flotando la ocupación en el resto del 50 o 55%.
Para aliviar esta situación, el presidente del clúster solicita una mejor comunicación. «Necesitamos más frecuencias de vuelo», dice, mientras critica el «trastorno del aeropuerto» en Galicia, que es «total».
«Afortunadamente», dice, «ese aeropuerto en Porto tiene» buenas conexiones «con Canadá y Estados Unidos para disparar turismo en Galicia.
Pardal también se refirió a las conexiones AVE con Galicia, «totalmente insuficiente» y que alcanza «en Acusagotas», además de la crítica anticipada de la disminución anticipada con la que están a la venta ciertas rutas. «Nos olvidaron por completo», se lamentó.