Estados Unidos deportó el lunes al ex narcotraficante Osiel Cárdenas Guillén a México, transfiriendo la custodia del ex líder del cartel del Golfo a las autoridades mexicanas en la ciudad fronteriza de Tijuana, según fuentes del gobierno mexicano.
Cárdenas, uno de los narcotraficantes más notorios de la historia de México, fue liberado de una prisión estadounidense en agosto y puesto bajo custodia de funcionarios de inmigración.
«En este día, Osiel Cárdenas, quien se encontraba internado en el Altiplano del Estado de México, por delitos de delincuencia organizada, contra la salud y operaciones con recursos de procedencia ilícita», dijo una fuente del gobierno federal.
Cárdenas, ex líder del Cartel del Golfo, presidió algunos de los episodios más sangrientos de violencia de pandillas en el turbulento pasado de México y se le atribuye la transformación del tráfico de drogas mediante la adopción de tácticas hiperviolentas como la decapitación.
Cárdenas fundó Los Zetas, un brazo armado del cartel del Golfo formado por ex miembros de las fuerzas especiales del ejército. Fue capturado después de un tiroteo en 2003 y extraditado a Estados Unidos en 2007, luego sentenciado a 25 años de prisión en 2010.
Más tarde, Los Zetas se separaron y se convirtieron, por un tiempo, en el grupo criminal más mortífero de México antes de desaparecer.