ENEa monitorea pingüinos antárticos con supercomputadora y drones
La inteligencia artificial hace su debut en la Antártida al contar y clasificar los pingüinos Adelia cerca de la base italiana Mario Zucchelli. Este enfoque innovador, desarrollado por ENEA, integra drones, Iowa y el poder de la supercomputadora CRESCO.
Ricardo Scipinotti, el investigador de ENEA y líder de la expedición en la base ítalo-francesa de Concordia, explica: «La precisión del conteo alcanzó el 97% para los pingüinos adultos y el 89% para los polluelos, valores extremadamente seguros».
Los resultados se obtuvieron mediante el análisis de una ortofoto de los dos principales sitios de pingüinos cerca de la base Zucchelli, Punta Edmonson y Cala Adelia, que albergan aproximadamente 4,000 y 10,000 pingüinos respectivamente. El conteo se realiza en dos momentos clave del verano austral: a mediados de noviembre durante la eclosión y a mediados de enero cuando los polluelos son móviles.
«Utilizamos drones especializados capaces de operar a bajas temperaturas y volar sobre grandes áreas remotas sin molestar a los animales, manteniendo una altitud de más de 50 metros”, agrega Scipinotti.
Las imágenes recopiladas son procesadas por el Clúster CRESCO, que genera ortofotos de alta resolución (aproximadamente 1 cm/píxel), lo suficientemente detalladas para identificar tanto adultos como polluelos. Luego, una red neuronal especialmente entrenada reconoce y distingue las diferentes categorías de pingüinos.
Samuel Pierattini del departamento de desarrollo de sistemas de ENEA explica: «Utilizamos el superordenador CRESCO para entrenar la red neuronal con aproximadamente 400 imágenes que contienen más de 3,000 pingüinos recolectados durante las últimas ocho expediciones».
Esta metodología es más rápida y permite monitorear a distancia áreas de difícil acceso, reduciendo al mismo tiempo el impacto sobre los animales. El siguiente paso será mejorar el entrenamiento de la red para incluir a los pingüinos emperador y desarrollar una red neuronal ligera para ser instalada directamente en drones, permitiendo un conteo en tiempo real.
Actualmente, la 40ª expedición del Programa Nacional de Investigaciones Antárticas (PNRA), financiada por el Ministerio de Universidad e Investigación (MUR) y gestionada por el Consejo Nacional de Investigaciones (CNR) con el apoyo de ENEA y el Instituto Nacional de Oceanografía y Geofísica Experimental (OGS).