El impacto del cambio climático en las «obras de arte»

El impacto del cambio climático en las «obras de arte»
Él cambio climático No sólo está acelerando la pérdida de biodiversidad, exacerbando las desigualdades sociales y dañando nuestra salud pública, sino que también nos está amenazando seriamente. patrimonio artístico y cultural.
Monumentos y obras de arte ubicados al aire libre son particularmente vulnerables a cambio climático. Esto es lo que sucede en las cuevas con arte rupestre, monumentos y esculturas ubicado afuera.
Sin embargo, el obras de arte almacenados en instalaciones climatizadas, como museos o almacenes, también pueden sufrir el impacto de las variaciones atmosféricas. Los edificios que albergan estas piezas fueron, en su mayor parte, diseñados y construidos de acuerdo con Condiciones locales y el entorno de su tiempo..
entender bien como fluctuaciones climáticas El comportamiento de estos espacios puede variar, y su microclima se ha convertido en una prioridad a la hora de desarrollar nuevas estrategias de conservación. obras de arte.

Altamira a merced del cambio climático

Durante décadas, numerosos estudios han analizado cómo los cambios en las condiciones ambientales de las cuevas con arte prehistórico influyen en su conservación, con especial atención al impacto en el número de visitantes. Un ejemplo notable es la cueva de Altamira, conocida como Capilla Sixtina Paleolítica por sus pinturas, que abarcan más de 15.000 años de historia y ahora están amenazadas por cambio climático.
En su mayor parte, estas cavidades han sido estudiadas como microclimas aislados del ambiente exterior, ya que la mayoría de estas cavidades están prácticamente cerradas y el tipo de cambio es mínimo.
Un reciente estudio interdisciplinar, en el que participa el Museo Nacional de Ciencias Naturales (MNCN-CSIC) y publicado en Informes científicosANÁLISIS las interacciones entre la atmósfera externa de la cueva de Altamira y el microclima interno. La investigación destaca cómo las variaciones atmosféricas están relacionadas con cambio climático Afectan el ambiente interno de la cueva y sus pinturas.
«Si bien los cambios y condiciones antropogénicas ocasionadas al microambiente de la cavidad fueron de tal magnitud que superan los efectos que cambio climático que actualmente ejercen han desencadenado procesos de deterioro cuyo efecto acumulativo incrementa el actual riesgo de conservación», explica. Sergio Sánchez-Moralautor principal del artículo.
Los investigadores han desarrollado ecuaciones dinámicas para controlar la variabilidad temporal y espacial de los flujos de agua. Intercambio de gases, energía y materia. entre el ambiente externo y el ambiente subterráneo. Así, el estudio analiza las interacciones entre estos factores, teniendo en cuenta las influencias internas y externas sobre el microclima de la cueva.

Estudia el pasado para predecir el futuro de la atmósfera exterior e interior de la Cueva de Altamira

La investigación también cubre el pasado y el futuro de la atmósfera externa e interna a Cueva de Altamira. Utilizando un modelo matemático basado en series temporales de imágenes de satélite, los científicos estimaron las concentraciones de gases de las cavernas de 1950 a 2100.
«De la serie de datos obtenidos en el marco Cueva de Altamira Durante los períodos de ausencia y visitas mínimas, utilizamos técnicas avanzadas de modelado matemático para comprender y predecir la dinámica de la concentración de Co.2 en la atmósfera de la cavidad», indica el investigador.
Crecimiento en concentración de CO2 en la cavidad es fundamental porque activa diversos procesos de deterioro en las pinturas rupestres. Por un lado, aumenta la acidez del agua, disolviendo la roca y arrancando los pigmentos, lo que provoca Formación de corteza debido a la sobresaturación y la reprecipitación mineral.. Además, este crecimiento también aceleraría la colonización bacteriana de las ilustraciones.
Otro factor crítico es el crecimiento en humedad aire relativo, lo que “puede constituir un elemento de daño fatal ya que, además de promover procesos de disoluciónfavorece el desarrollo colonias microbianas que modifican y recubren los soportes», señala Sánchez-Moral.
Además, basándose en datos del IPCC, se realizó una simulación de la concentración de Co.2 para el período hasta 2100 bajo diferentes condiciones climáticas.
«En el escenario más pesimista, se espera un aumento de la temperatura global +3,5°C hasta finales de siglo. Esto implicaría un aumento en la concentración de Co.2 en Cueva de Altamira y, lo que puede ser peor, una mayor inestabilidad ambiental con rangos fluctuantes de temperatura y humedad que agravarían los procesos de corrosión de la roca que soporta las pinturas. Además, el avance de la colonización microbiológica que ya daña las representaciones artísticas”, afirma el investigador.

Efectos sobre el exterior de las obras de arte

Sin embargo, además de las obras prehistóricas encontradas en las cavidades, otras manifestaciones artísticas también sufren directamente los efectos cambio climático. Una iniciativa liderada por el Instituto Geológico y Minero de España (IGME-CSIC) analiza cómo los distintos escenarios climáticos influyen también en el patrimonio histórico-artístico español. ubicado afuera.
Gran parte de este patrimonio histórico, que pertenece al Patrimonio Mundial de la UNESCO, está formado por edificios, monumentos y esculturas. Estos artefactos están en exhibición. eventos hidrometeorológicos extremoscada vez más frecuentes e intensos.
Él proyecto RESCATE analiza la dirección de agentes erosivos como el viento, la lluvia o las oscilaciones térmicas «in situ» con 60 estaciones meteorológicas. Además, los investigadores del IGME recopilan datos de seis estaciones de exposición directa, donde se colocan rocas expuestas en diferentes orientaciones.
Los análisis realizados sobre diversos materiales nos permiten desarrollar modelos propios para simular la degradación que estos artefactos pueden sufrir en las próximas décadas.
«Estudiamos los efectos sobre diferentes rocas y metales representativos del patrimonio español. Destaca la piedra Bateig, una calcarenita alicantina utilizada localmente desde el siglo XVI y ampliamente en España en los siglos XIX y XX”, afirma. Javier Martínez Martínezresponsable de SALVAR en el IGME.

Barreras para detener los daños del cambio climático

En cuanto a las medidas de protección y conservación, se dividen en dos tipos principales: medidas de protección conservación directaque actúan sobre materiales como rocas, metales o madera, aplicando productos para mejorar su resistencia al envejecimiento; y las medidas de conservación preventivaque ajustan las condiciones de exposición para reducir los efectos cambio climático.
“En eso proyecto RESCATE Nos centramos en el potencial de las medidas preventivas contra la acción climática.

Colocando barreras artificiales (basadas en ingeniería o soluciones urbanas) o barreras naturales (barreras vegetales, etc.) intentamos mitigar la acción de este agente”, añade el investigador.

Museos obligados a adaptarse a las consecuencias del cambio climático

Perdido nuevos escenarios climáticos causados ​​por la actividad humana no sólo afectarán a las cavidades o artefactos expuestos al exterior, sino que también supondrán una amenaza para la el arte que se guarda dentro de los edificios.

A pesar de que, tal y como indica el investigador del MNCN-CSIC Sergio Sánchez-Moral «el efecto de cambio climático «La exposición a las obras de arte en museos o almacenes con aire acondicionado no debería ser significativa», al igual que en las cuevas, los microclimas de estos espacios no están completamente aislados y los cambios ambientales pueden tener un impacto en el arte que almacenan.

«En algunos casos sería necesario implementar o mejorar intervenciones con efectivas membranas aislantes en las paredes, la instalación de ventanas con rotura de puente térmico y antecámaras de control de temperatura con doble o triple sistema de cierre en los accesos”, comenta el investigador.

Los edificios históricos más vulnerables al cambio climático

Perdido edificios historicos que el interior de la tienda de arte es más vulnerable a estas variaciones y por ello el investigador de la Universidad de Málaga Carmen María Muñoz González estudiar Cómo influyen el clima y los escenarios climáticos futuros en el patrimonio mueble e inmueble.

“Evaluamos si estos entornos son propensos a biodeterioro, riesgos mecánicos por fluctuaciones higrotérmicas y pérdida de color por radiación UV» dice el experto.

“En los edificios históricos el control de las condiciones ambientales es complicado por sus sistemas constructivos y su nivel de protección. Con patrones climáticos cambiantes mantener condiciones estables se vuelve más difícil, exponiendo las obras de arte a daños irreversibles”, añade Muñoz.

Entre los materiales artísticos, cobran gran importancia los materiales orgánicos como la madera, los tejidos o las pinturas. sensible a los cambios termohigrométricos por lo que «debemos controlar, vigilar e intervenir, si es necesario, para prevenir los daños asociados a las nuevas condiciones», indica el científico.

Además, el grupo de investigación de Muñoz evalúa el aumento del gasto energético y de las emisiones asociadas a la rehabilitación y climatización de estos edificios. “Los sistemas de aire acondicionado actuales no funcionan bien en condiciones extremas. El aumento de las temperaturas podría aumentar el consumo de energía en un 10-15% en el futuro», concluye el investigador.

FUENTE

nuevaprensa.info

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