La ministra de Hacienda, Transición Económica y Transformación Digital de Ceuta, Kissy Chandiramani, se disculpó públicamente por invitar al «pequeño Nicolás» a la ciudad como participante en el evento «Ceuta Influye», que costó al Gobierno 45.000 euros.
La iniciativa, celebrada entre el 11 y el 14 de septiembre, atrajo a la ciudad autónoma a 45 ‘influencers’ y directivos, para quienes el Ayuntamiento organizó varias actividades lúdicas y divulgativas para mostrarles sus atractivos turísticos y fiscales y que, a su vez, los invitados difundirían contenidos positivos sobre Ceuta en sus redes sociales.
El acto con el que el Ejecutivo local pretendía «competir con Andorra» y «posicionar a Ceuta como destino estratégico» para los «nómadas digitales», resultó ser «un absoluto despilfarro de 45.000 euros» para el representante del Movimiento por la Dignidad y Ciudadanía (MDyC), Fátima Hamed.
El líder del partido local interrogó al Gobierno en el pleno de este viernes para preguntarle sobre el coste del proyecto, los criterios para seleccionar a los invitados o por qué la fiesta final fue en Marbella, pese a que tenía como objetivo promocionar la imagen de Ceuta.
¿A qué sector pertenece «el pequeño Nicolás»?», preguntó Hamed. «Teniendo en cuenta que ha habido mucho revuelo en las redes sociales por la presencia del ‘pequeño Nicolás’, creo que corresponde pedir disculpas», dijo Chandiramani.
Unas horas más tarde, el citado Francisco Nicolás Gómez abordaba la política de Ceuta a través de su cuenta de Instagram. «Lamento todos los platos de jamón y bebidas que he comido y beberé», escribió en un «story». «Esta señora hubiera preferido otro tipo de invitados que no defienden a la Nación. Incomoda mi discurso», continuó en sus redes sociales.