Ecuador comenzó el domingo a recibir electricidad que compró a Colombia para hacer frente a la crisis energética que azota al país sudamericano desde hace meses, y el gobierno anunció que reduciría el racionamiento eléctrico de 12 a ocho horas diarias.
La ministra de Energía, Inés Manzano, dijo que la electricidad proveniente de Colombia, sumada a los pronósticos de lluvias para los próximos días, llevó a las autoridades a tomar la decisión de reducir el racionamiento en el suministro de energía eléctrica que ha trastocado la vida cotidiana de los ecuatorianos.
Colombia ha iniciado su suministro con 420 megavatios, dijo Manzano en una entrevista con el canal de televisión pública Ecuadortv, aunque podría haber ajustes dependiendo de la disponibilidad. La capacidad máxima de la línea de transmisión entre Ecuador y Colombia es de 450 megavatios.
«Por eso… podemos hacer estas reducciones de cuatro horas» que ayudan a los ciudadanos a organizarse, afirmó el ministro.
Ecuador atraviesa una intensa sequía que ha paralizado el sistema de generación hidroeléctrica que cubre más del 70% de la demanda. La falta de lluvias provocó una reducción del caudal de los ríos que alimentan las principales centrales hidroeléctricas del país andino, que se vieron obligadas a operar a capacidad mínima e incluso a paralizar sus plantas, generando un déficit de más de 1.000 megavatios.