¿Cuántos kilómetros antes de cambiar los neumáticos?
Los neumáticos de coche no duran para siempre y en algún momento llega el momento en el que tienes que cambiarlos. ¿Después de cuántos kilómetros? La respuesta no es sencilla porque depende de varios factores como el estilo de conducción, el diseño de la banda de rodadura, la zona climática, las condiciones de la carretera, la frecuencia de uso y el mantenimiento adecuado de los neumáticos. Sin embargo, se puede estimar ¿Cuánto tiempo puede durar un neumático? antes de tener que reemplazarlo.
CAMBIO DE NEUMÁTICOS: ¿DESPUÉS DE CUÁNTOS KM DEBE HACERSE?
Empecemos diciendo que hay estadísticas europeas que muestran una distancia media entre 25 mil y 50 mil km para quienes, por regla general, aplican un estilo de conducción normal, con picos que pueden alcanzar los 75 mil kilómetros en el caso de velocidades tranquilas. Por el contrario, puede bajar de los 10.000 km si los neumáticos se aprovechan al máximo de su potencial. Así, aunque en principio los neumáticos están diseñados para durar entre 40 y 50 mil km, la duración puede ser significativamente mayor o menor. Un kilometraje de 30/35 mil km puede ser un buen compromiso para convencerle de que es hora de cambiar los neumáticos, pero no deja de ser una estimación.
CÓMO SABER QUE NECESITAS CAMBIAR TUS NEUMÁTICOS
La legislación italiana exige que los neumáticos de turismos y furgonetas se reemplacen cuando alcancen la profundidad del dibujo 1,6 milímetros. Este límite es visible en los neumáticos mediante indicadores de desgaste especiales situados en el interior de las ranuras principales de la banda de rodadura. Calcula: se trata de pequeños relieves de 1,6 mm de altura. Por lo tanto, se debe cambiar el neumático cuando la profundidad residual de la banda de rodadura alcance estos indicadores de desgaste.
Otro factor a considerar es la edad de los neumáticos. Los grandes fabricantes de neumáticos recomiendan sustituirlos, incluido el de repuesto, si han pasado más de 10 años desde la fecha de fabricación. Este consejo debe seguirse incluso si el neumático no parece especialmente desgastado desde el exterior y la profundidad residual de la banda de rodadura no ha alcanzado el mínimo legal de 1,6 mm.
Conocer la edad física de los neumáticos de coche es muy sencillo: todos los neumáticos tienen una marca con las siglas en el flanco. Un punto seguido de una serie de números y un código que informa la fecha de fabricación. Este código consta de 4 dígitos: los dos primeros indican la semana (del 01 al 53) y los dos últimos el año de producción. Por ejemplo, el código 1419 indica que el neumático fue fabricado en la semana 14 de 2019.
Si todas las señales conducen a la necesidad de reemplazar los neumáticos, debe hacerse rápidamente para evitar riesgos. Puedes elegir si cambiar los neumáticos tú mismo, que es una operación bastante sencilla, o acudir a un taller.
EVITE EL DESGASTE DE SUS NEUMÁTICOS. PARA AMPLIAR SU VIDA
Un viejo proverbio dice que prevenir es mejor que curar, y eso también se aplica a los neumáticos de vehículos. Para garantizar una buena longevidad, el aspecto clave es el mantenimiento: Los neumáticos que se revisan periódicamente deben durar más que los que se descuidan. Estos controles, realizados preferentemente por un distribuidor de neumáticos de confianza, deben ser bastante frecuentes y tener en cuenta tanto la apariencia externa de los neumáticos para garantizar que no haya burbujas, protuberancias, cortes y desgaste anormal de la banda de rodadura, como la presión de inflación. Los neumáticos con la presión adecuada para la carga realmente funcionan correctamente y mantienen la máxima eficiencia, garantizando una mayor duración y un mejor comportamiento en carretera. Mantener la presión correcta también sirve para optimizar el consumo de combustible.
Prevenir el desgaste prematuro de los neumáticos también es importante para el estilo de conducción. Acelerar y frenar bruscamente, así como tomar curvas rápidas, son maniobras que reducen la esperanza de vida de los neumáticos de los automóviles. Sin embargo, basta con conducir un poco más lento o acelerar con un poco menos de fuerza para tener enormes ventajas en términos de durabilidad.