¿Cuál es el mejor método para reducir tus gastos energéticos este invierno?
Aislamiento térmico: la mejor arma contra la pérdida de calor
Una casa mal aislada actúa como un colador térmico: el calor se escapa tan rápido como se produce. Según Adéme, el 30% de la pérdida de calor proviene de los techos, mientras que el 20% proviene de las paredes.
¿Por qué invertir en aislamiento?
El aislamiento es una solución a largo plazo que ofrece varias ventajas:
- Reducción sostenible de facturas: una casa bien aislada utiliza mucha menos energía para calefacción.
- Mejora del confort térmico: No más corrientes de aire y paredes frías.
- Valoración de la propiedad: Un buen aislamiento aumenta la eficiencia energética de una vivienda (DPE), lo que es un activo para la reventa.
En concreto, un aislamiento eficiente puede reducir sus necesidades de calefacción hasta en un 50%. Por ejemplo, una casa reformada puede pasar de consumir 250 kWh/m² al año a tan solo 100 kWh/m².
