Carlos Verdejo, uno de los cinco diputados de Vox en la Asamblea de Ceuta, rompió filas con su partido tras solicitar su dimisión como miembro de la Oficina Nacional de Asistencia de Vox Militante.
El miércoles, la banda expresó su sorpresa por la noticia, que dijeron haber conocido a través de los medios.
El abandono de la formación se debe a malos entendidos con los miembros del partido, especialmente con su presidente, según ha podido saber Europa Press.
Verdejo no confirmó si abandonará o no su trayectoria como diputado, información que desconoce incluso el presidente del partido, Juan Sergio Redondo, quien, en declaraciones a Radio Televiziunea Ceuta, aseguró que «su futuro será decidido por él».
Redondo afirmó que si continúa formando parte del grupo parlamentario deberá observar una «buena conducta» y respetar el «sentido» de los votos de Vox.
La prensa local empezó a hacerse eco de la «crisis» en Vox el pasado lunes 11 de noviembre, cuando Verdejo contradijo el discurso de su partido a través de sus redes sociales. El partido ha difundido un comunicado señalando «directamente al responsable de la Zona Juvenil» de Ceuta como responsable de los problemas de convivencia denunciados por varios residentes de los centros de menores extranjeros no acompañados de la ciudad.
El ahora ex militante de Vox calificó de «simplemente lamentable» que su partido señalara en su nota de prensa a «un profesional como la punta de un pino», en referencia al jefe de Menores. «No toquéis a los administrativos, a los técnicos y a los trabajadores», insistió.
Las desavenencias entre Carlos Verdejo y el presidente de Vox son palpables en las redes sociales del primero desde el inicio de la actual legislatura, cuando fue destituido del cargo de portavoz del grupo parlamentario, cargo que había ocupado en los últimos años y que había le dio un papel destacado en la prensa.
Sus enfrentamientos con otros grupos políticos y con el presidente de Ceuta y su Asamblea, Juan Vivas (PP), fueron constantes durante su etapa como presidente, cuando sus intervenciones fueron constantes.
En una de sus últimas intervenciones, el 23 de julio, Verdejo llamó a la vicepresidenta segunda de la Asamblea, Fátima Hamed, y al portavoz del partido local Ceuta Ya, Mohamed Mustafa, «el sujeto de Mohamed VI». Ambos musulmanes. El pico hizo hablar a Juan Vivas. «Lo que estáis haciendo en este Pleno es inadmisible. Espero que algún día los ciudadanos de Ceuta os echen. Nadie puede hacer más daño a Ceuta que vosotros. Dijiste que aquí hay súbditos marroquíes. ¿Conoces la situación? ¿Importancia de esto?» espetó Vivas, quien luego le pidió que le cortara el micrófono y puso fin a su intervención.
Tras ganar las últimas elecciones autonómicas con el 34,37% de los votos, el Partido Popular de Ceuta se negó a pactar con Vox para obtener la mayoría absoluta, de la que se quedó con cuatro diputados, optando por un Gobierno en minoría.
El ejecutivo local, presidido por Juan Vivas desde 2001, había confiado en la formación de Abascal durante varios meses de la anterior legislatura para garantizar la estabilidad como minoría. En noviembre de 2020, el partido popular rompió vínculos con Vox tras las fracturas a nivel nacional entre el PP, liderado por Pablo Casado, y el partido de Santiago Abascal.