Bruselas relajará el seguimiento de los planes de recuperación para acelerar el gasto y evitar perder fondos
La Comisión Europea ha propuesto flexibilizar el seguimiento de los planes de recuperación y resiliencia para acelerar la implementación de los fondos antes de agosto de 2026, fecha límite para completar las medidas y evitar así la pérdida de millones de euros.
Esto se detalla en una comunicación de la Comisión publicada el lunes, que recuerda que a finales de abril de 2024 se habían pagado a los Estados miembros 232.000 millones de euros, algo más de un tercio del total de 648.000 millones que dispone el mecanismo.
«En este momento y teniendo en cuenta la naturaleza temporal del fondo, todos los esfuerzos colectivos deben centrarse en la implementación completa y oportuna de los planes de recuperación y resiliencia para 2026, abordando, si es necesario, los obstáculos a la implementación a medida que surjan, de manera flexible,» indica las directrices del Ejecutivo comunitario.
Consciente del «apretado calendario de ejecución», Bruselas ha reconocido que «puede ser necesario adaptar el contenido de los planes para abordar los retos emergentes y cambiantes», por lo que propone simplificar «al máximo» los requisitos de seguimiento necesarios de los estados miembros.
Para ello, se reducirá la información solicitada en los informes semestrales sobre la ejecución de los planes y se aceptará que un Estado miembro elimine en sus informes las etapas de seguimiento que las administraciones nacionales deben prever sobre la ejecución de las medidas pertinentes.
En cuanto a la auditoría y control de los planes, Bruselas también apoyará posibles «oportunidades de simplificación» en este ámbito, para garantizar «sinergias y complementariedad» con las auditorías realizadas por las autoridades nacionales y europeas.
También será posible, «como último recurso y en casos excepcionales», combinar el apoyo de los planes de recuperación y otros fondos de la UE de forma proporcional, evitando la doble financiación.
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