Asiron valora el «desbloqueo» de los caídos y busca «consenso» en concurso de ideas
El alcalde de Pamplona, Joseba Asirón, destacó que el futuro del Monumento a los Caídos y su entorno está actualmente «en el plano político», confió en aunar distintas «sensibilidades» en el proceso y lo consideró «inevitable» revertir el «simbolismo del edificio» como «exaltación del franquismo». También cree que «Maravillas Lamberto» es un «nombre apropiado» para el futuro centro de memoria histórica.
Según explicó respondiendo a preguntas de los medios, la «resolución final» sobre el Monumento a los Caídos debe pasar por «tres escenarios». Por un lado, el «desbloqueo» de una situación «enraizada desde hace demasiado tiempo», que corresponde a los partidos políticos y que se saldó con el acuerdo alcanzado por EH Bildu, PSN y Geroa Bai. Después será el turno del Parlamento de Navarra de «trazar el nuevo marco legal» que permita la intervención en la Plaza de la Libertad y el Monumento a los Caídos.
Y por último, un nuevo concurso de ideas, que corresponderá al Ayuntamiento de Pamplona y que Asiron esperó que se lleve a cabo «con la misma eficacia» que otros procesos similares para el paseo de Sarasate o el centro de interpretación de la pelota vasca. En este sentido, indicó que las ideas que se presentaron en el concurso de ideas en la legislatura 2015-2019 pueden ser “un punto de partida para el desarrollo que se dé a partir de ahora”.
Preguntado sobre las críticas de las asociaciones memorialistas y de Contigo-Zurekin, partidarios de la demolición del edificio, el alcalde subrayó que «cuando se toman decisiones y se desbloquean soluciones, siempre hay grupos, personas y partidos que creen que las soluciones que se proponen tomadas no satisfacen sus aspiraciones» y entendieron que se sienten «defraudados». En este sentido, ha señalado que hay «muchos miembros de EH Bildu» que apoyan el derribo y miembros de los colectivos memorialistas que «reconocen que existen otras posibilidades además de la desaparición física» del Monumento a los Caídos.
En este sentido, esperó que el próximo concurso de ideas atraiga «el mayor número posible de seguidores» y confió en que, en el transcurso de un proceso «que es muy largo, podamos recoger estas sensibilidades». Joseba Asirón ha señalado que «cuando se desbloquea un problema que lleva «82 años» arraigado, el consenso es una «aspiración» pero también una «utopía». «Lograr un consenso que abarque a toda la sociedad es muy difícil, es una aspiración y seguiremos trabajando», insistió.
El alcalde de Pamplona destacó que «el edificio y todo su programa iconográfico nacen con el objetivo de enaltecer el franquismo, legitimando el golpe de Estado de 1936». Algo que «hay que revertir a partir de ahora, y a medida que nos alejemos de esa exaltación, tendremos que incorporar otro tipo de contenidos que deben denunciar el fascismo y resaltar los valores democráticos». Creo que es algo irrenunciable.
Por otro lado, consideró que «Maravillas Lamberto» es un «nombre apropiado» para el futuro centro de memoria histórica en el que se convertirá el edificio de los Caídos. «Ella es víctima de la violencia fascista, y si vamos a revertir ese programa iconográfico, no se me ocurre un nombre mejor», dijo.
En cuanto a las decisiones arquitectónicas, se hizo referencia al próximo concurso de ideas que «definirá la intervención física sobre el edificio». «Tenemos que priorizar la competencia de ideas y lo que deciden los ciudadanos», subrayó.
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