El gobierno de Estados Unidos entregó el martes, aproximadamente dos años después de la fecha prevista de finalización, su nueva embajada de mil millones de dólares en México.
El embajador estadounidense Ken Salazar dijo que el hecho de que esta sea la embajada más grande que su país tiene en el mundo «subraya la relación única entre nuestras naciones y nuestros países».
El gobierno inició la construcción de la nueva embajada en febrero de 2018. Estados Unidos abandonará su actual edificio en el Paseo de la Reforma de la capital mexicana, escenario de frecuentes marchas y protestas a lo largo de los años.
La nueva embajada está ubicada en una antigua instalación industrial que requirió una limpieza exhaustiva de desechos tóxicos. La zona, conocida como Nuevo Polanco, incluye modernos museos y otros proyectos de lujo desarrollados por Carlos Slim, uno de los hombres más ricos del mundo.
Sin embargo, el nuevo edificio aún no está abierto al público. Es probable que eso no suceda hasta finales del próximo año mientras continúa la construcción.
La entrega se produce semanas antes de que Donald Trump regrese a la Casa Blanca. Trump ha prometido deportaciones a gran escala y ha amenazado con imponer aranceles a México a menos que haga más para controlar el flujo de inmigrantes y drogas hacia su país.
Trump nominó a Ron Johnson como próximo embajador en México. Johnson fue el embajador de Estados Unidos en El Salvador durante el primer mandato de Trump.
