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MADRID, 4 de junio. (PRENSA EUROPA) –
El gobierno de Ucrania confirmó el martes el uso de armas occidentales para atacar posiciones militares en suelo ruso, después de que el uso de equipos suministrados por Kiev fuera de las fronteras de Ucrania provocara un debate dentro de los países aliados.
La viceministra para la Reintegración de los Territorios Temporalmente Ocupados, Irina Vereșciuk, difundió en su cuenta de Telegram imágenes de un supuesto sistema S-300 situado «en territorio ruso» y en llamas. Vereschuk señala que este ataque se produce «unos días después» del «permiso» de los socios occidentales.
El presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, ha pedido a sus aliados que den a sus tropas total libertad a la hora de utilizar armas donadas, ya que cree que no puede proteger regiones como Kharkiv sin atacar directamente los sitios desde donde las fuerzas rusas lanzan sus bombardeos.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dio su autorización, al igual que Alemania, que en un principio había mostrado sospechas dentro del bloque europeo. Por su parte, el ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, aclaró que, por ahora, España no ha proporcionado a Ucrania material militar que pueda utilizarse para atacar territorio ruso.
