Toledo abarrotado de visitantes por el calor y la custodia brillante
Durante otro año, la ciudad de Toledo ha vuelto a vivir y disfrutar del Corpus Christi, declarado de interés turístico internacional, por lo que el calor no fue un impedimento para que miles de personas pudieran contemplar la custodia en la procesión.
Fueron precisamente las altas temperaturas las que llevaron al Consejo Municipal de Toledo a distribuir diez mil botellas de agua en total en la Plaza del Ayuntamiento, Plaza de San Vicente, Plaza de Zocodover y Plaza Prima, las cuales se agotaron por completo.
Tanto los vecinos originales como los visitantes, con abanico en mano, pudieron disfrutar de la capital regional, decorada para la ocasión el jueves, describiéndola como un «milagro» de «explosión de color» que se puede contemplar en el Corpus, y sintiéndose «emocionados» y «afortunados» de vivir esta experiencia.
El día transcurrió, según la Cruz Roja, con un total de cinco asistencias, una de ellas por caída y el resto por lipotimias debido a las altas temperaturas.
La jornada comenzó a las 8:00 con el tradicional disparo de las bombas reales, seguido del desfile de gigantones y cabezudos precedido por la Tarasca y la sagrada liturgia en el rito hispano-mozárabe, presidida por el arzobispo de Toledo, Francisco Cerro Chaves.
Tras finalizar la liturgia sagrada, la custodia de Arfe salió por la puerta plana de la Catedral Primada poco antes del mediodía, entre los aplausos de los participantes para iniciar la procesión por las calles de Toledo cubiertas con las tradicionales alfombras de romero y espliego.
El himno nacional, los cañonazos, los salvas reales y el repique de campanas de la Catedral y todas las iglesias de la ciudad recibieron a la gran torre eucarística que, durante ocho años de Enrique de Arfe, brilló con toda su característica luminosidad.
Durante el recorrido, el Santísimo Sacramento fue acompañado por hermandades, cofradías, niños de Primera Comunión, órdenes religiosas, miembros del seminario diocesano, el clero, la Academia de Infantería y la Universidad Regional, así como por dulzainas, aclys, timbaleros y autoridades civiles.
La comitiva, tras recorrer cuatro veces, se dirigió a la Plaza del Ayuntamiento, la Calle Martín Gamero, la Calle Comercio y la Plaza de Zocodover.
Poco antes de las 12:30, una lluvia de pétalos y aplausos anunciaron la llegada de la custodia a la Plaza de Zocodover, donde se colocó, como manda la tradición, bajo el Arco de la Sangre, momento en el que se hizo silencio para escuchar las palabras del arzobispo.
Entre los líderes políticos que participaron en la procesión se encontraban el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, acompañado por el Consejero de Hacienda, Administraciones Públicas y Transformación Digital, Juan Alfonso Molina, y la Consejera de Bienestar Social, Barbara García Toijano.
En representación de las Cortes, participaron en la procesión el presidente Pablo Bellido, la primera vicepresidenta y el segundo vicepresidente, Josefina Navarrete (PSOE) y Santiago Lucas-Torres (PP) respectivamente, la primera secretaria, Charo García Saco (PSOE) y la segunda secretaria, Tania Andicoberry (Ciudadanos).
Por parte del grupo parlamentario de Vox, participaron sus cuatro diputados: David Moreno, Iván Sánchez, Luis Blázquez y Francisco Cobo.
En representación del PP, estaban presentes su presidente, Paco Núñez; la Secretaria General y portavoz del PP en Castilla-La Mancha, Carolina Agudo; y el Vicesecretario del grupo parlamentario popular en Castilla-La Mancha, Santiago Serrano.
Por parte del PSOE, participaron los diputados Silvia Fernández y Álvaro Gutiérrez en la procesión.
De la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) participaron en la procesión alrededor de cien personas, lideradas por el Rector, Julián Garde, el Gerente, Tomás López, la Secretaria General, Isabel Gallego, y gran parte del equipo de gobierno. Además, estudiantes y representantes del Consejo de Estudiantes.
La Corporación Municipal estuvo encabezada por el alcalde de Toledo, Carlos Velázquez, y también participaron la presidenta de la Diputación de Toledo, Conchi Cedillo, junto con todo el equipo de gobierno de la institución provincial.
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