Rusia captura a británico en combates en región de Kursk.
El ejército ruso capturó a un británico que luchaba junto a las tropas ucranianas en la región rusa de Kursk, escenario de una incursión en agosto, según los medios rusos, que sugieren que el hombre era un instructor militar, sin autoridades en Rusia. El Reino Unido no se ha pronunciado oficialmente sobre este asunto.
El hombre, que se identifica como James Scott Rees Anderson, dice en un vídeo obtenido por la agencia de noticias rusa TASS que sirvió en las Fuerzas Armadas británicas entre 2019 y 2023, tras lo cual se unió a la Legión Extranjera Ucraniana, creada tras la invasión del país por el ejército ruso en febrero de 2022.
También afirma que pasó varios meses entrenando a soldados ucranianos cerca de la ciudad de Ingulets, alrededor de Krivoy Rog, después de lo cual las fuerzas ucranianas «le quitaron el pasaporte y el teléfono» y le ordenaron desplegarse para apoyar la incursión en Kursk.
En la grabación, cuya autenticidad no ha sido verificada, el hombre aparece con las manos atadas. El Reino Unido no se ha pronunciado sobre el vídeo, aunque el Ministerio de Asuntos Exteriores británico dijo que estaba «apoyando a la familia de un hombre británico tras los informes de su arresto», según la televisión BBC.
Por su parte, el padre del hombre indicó en declaraciones al diario ‘Daily Mail’ que está «conmocionado» por el vídeo y añadió que teme que su hijo sea torturado. Además, destacó que la familia le pidió que no fuera a Ucrania, aunque él «pensó que estaba haciendo lo correcto».
«Espero que sirva como moneda de cambio, pero mi hijo me dijo que torturan a los presos, así que tengo miedo de que lo vayan a torturar», dijo, al tiempo que reveló que «estaba en casa con sólo un mes y medio» y que estaba planeando regresar al Reino Unido para las vacaciones de Navidad.
Las fuerzas armadas rusas capturaron a dos británicos en el verano de 2022 durante los combates en la ciudad de Mariupol. Ambos fueron condenados a muerte, aunque finalmente fueron liberados como parte de un acuerdo de intercambio de prisioneros con Ucrania mediado por Arabia Saudita.
Las tropas rusas han estado luchando contra las fuerzas ucranianas en la región de Kursk desde el 6 de agosto, cuando Kiev lanzó una ofensiva sorpresa contra el país en el conflicto que estalló en febrero de 2022 tras una orden de invasión emitida por el presidente ruso Vladimir Putin.
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