Resultados excelentes del programa Fluviatilis en control biológico.
Los cubos nido de Fluviatilis han demostrado favorecer el control biológico de diversas plagas a través de la vida silvestre. Esta solución basada en la naturaleza (SbN) cuenta con un amplio apoyo de organizaciones e instituciones.
En las últimas semanas, coincidiendo con la época de cría de aves y murciélagos, se han revisado los más de 300 refugios para animales salvajes instalados el año pasado en los arrozales, choperas, masas forestales y cultivos frutales de las zonas cercanas al río Segura, desde el embalse del Cenajo hasta el inicio del Cañón de Almadenes.
De los 298 refugios de vida silvestre analizados, 133 eran para aves y 165 para murciélagos. Los resultados indican una ocupación total del 23,48%. En detalle, de los 133 dormideros de aves, 42 estaban ocupados, lo que representa el 31,57%, mientras que de los 165 dormideros de murciélagos, 28 estaban ocupados, lo que representa el 16,96%.
Se confirmó que, meses después de su instalación, los refugios Fluviatilis estaban ocupados principalmente por murciélagos del género Pipistrellus y carboneros grandes. Todas estas especies son insectívoras y consumidoras de plagas.
Los murciélagos del género Pipistrellus son buenos consumidores de plagas del arroz como chilo supresor y también pueden consumir mosquitos y otros dípteros. Se estima que una hembra de murciélago lactante puede consumir entre 1.000 y 3.000 mosquitos por noche.
Por su parte, los herrerillos grandes son grandes consumidores de orugas, especialmente de lepidópteros defoliantes. Cada temporada de cría una pareja consume unas 50.000 orugas.
Mención especial merece el trinquete, un ave insectívora amenazada que se alimenta principalmente de grandes invertebrados y ocasionalmente de pequeños vertebrados.
Esta especie es un aliado en el control de plagas y un bioindicador de la buena calidad del hábitat agrícola. Los arrozales son un buen hábitat para la alimentación, pero las cavidades para anidar son raras. Este año, los nidos instalados sirvieron de refugio a una pareja de carracas, de las que criaron cuatro polluelos que fueron anillados.
El proyecto Fluviatilis y su NBS
La instalación de refugios de vida silvestre incluidos en el proyecto Fluviatilis busca aplicar soluciones basadas en La naturaleza para promover la bioeconomía a través del control biológico. El objetivo es mejorar el manejo de plagas en espacios agrícolas y reducir la presencia de insectos molestos o peligrosos para la salud pública.
En la iniciativa del proyecto Fluviatilis colaboraron el Ayuntamiento de Calasparra, la Denominación de Origen Arroz de Calasparra, la Confederación Hidrográfica del Segura y diversos agricultores.
Fluviatilis se benefició de una solicitud de ayuda de la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y Retos Demográficos (MITO) para proyectos transformadores centrados en impulsar la bioeconomía y contribuir a la transición ecológica, dentro del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) financiado con fondos NextGenerationEU.