La Consejería de Medio Rural y Política Agraria del Gobierno asturiano ha propuesto una regulación «continua» de la pesca fluvial para 2025, que combine «la necesaria conservación con la gestión sostenible de los recursos», según el concejal del sector, Marcelino Marcos.
El proyecto fue presentado el miércoles, basándose en datos científicos, en la reunión del Consejo de Ecosistemas Acuáticos y Pesca Continental.
La norma mantiene la línea estratégica aprobada el año pasado, basada en tres objetivos: conservación de los ecosistemas, gestión de la acuicultura y sostenibilidad social y económica de la pesca continental.
Marcelino Marcos presidió la reunión del consejo junto con el director general de Planificación Agraria, Marcos da Rocha. Durante el encuentro, ambos escucharon los argumentos de los agentes implicados en la organización de esta actividad y se comprometieron a incorporar en la norma aquellos enfoques que ayuden a perfeccionarla.
En general, el proyecto es continuo y mantiene cuotas de captura de tres salmones por día, tanto en zona libre como en conserva. La administración autonómica será la encargada de informar sobre la prohibición de seguir pescando una vez se haya completado esa cuota. También se repite el máximo de un salmón por pescador y día, en las modalidades con o sin muerte.
Además, la nueva propuesta reduce el horario de pesca del salmón, que comenzará media hora más tarde que la temporada pasada, a las 7:00 horas, y adelanta el horario de cierre a una hora antes del anochecer. De esta forma se evita que los pescadores tengan que realizar caladas sin luz.
La temporada de pesca del salmón entrará en vigor el segundo domingo de abril de 2025 y finalizará el 15 de julio. Por otro lado, el documento establece la obligación de limpiar herramientas y equipos, así como botas, flotadores y embarcaciones, al pasar de la pesca de una cuenca a otra. Esta medida tiene como objetivo prevenir la transmisión de enfermedades y larvas de especies no autóctonas.
En cuanto a la distancia mínima entre pescadores, ésta se fija en 20 metros, salvo que los aficionados lleguen a un acuerdo entre ellos y decidan no respetar ese margen.
El proyecto mantiene las cuotas anuales actualmente vigentes en las distintas cuencas hidrográficas y las subcuotas de las zonas francas: Nalón-Narcea (cota 240/subcota 80), Sella-Piloña (cota 210/subcota 70), Cares-Deva (cota 120/subcota 40), Esva (cota 20) y Eo (cota 30). Como novedad, quedará prohibida la pesca en los lagos de Saliencia, Calabazosa y La Cueva, dentro del Parque Natural de Somiedo. Además, el cierre del río Nisón, en Allande, pasa a ser zona libre de no muertes, y se plantea el cierre en el río Mállene y en los arroyos Chabachos y La Vieya, los tres en el concejo Valdés.
Las fincas de Los Estayos, en el alto Sella, y Miñances, en el alto Cares, permanecerán cerradas a partir del 15 de junio, con el fin de conservar los salmones que han crecido. La reserva de no captura Tablón, en el río Deva, pasa a ser libre para la trucha y cerrada para el salmón, para facilitar la introducción de la pesca en Peñamellera Baja.
En la reunión del consejo también se dio a conocer el censo de otoño del salmón de la cuenca del Narcea, en el que aumentó un 5,5%, hasta alcanzar los 460 ejemplares.
En el resto de cuencas hidrográficas no fue posible contarlas debido a su elevado caudal. A finales de año se conocerán los datos relativos al conteo del paso del salmón por las diferentes escalas de todas las cuencas.