Recoge tus aceitunas si tienes olivo.

El olivo, árbol por excelencia de los dioses, produce frutos deliciosos una vez bien sazonados. Tener uno en tu jardín es una garantía de elegir tus propias aceitunas y disfrutar de un sabor único, directo de regiones soleadas.
El olivo es originario del mar Mediterráneo y se cultiva desde hace más de 6.000 años. En la antigua Grecia, donde el olivo era sagrado, se encontraron los primeros rastros de su explotación. A lo largo de los siglos, los pueblos mediterráneos han aprendido a preparar las aceitunas para consumirlas. Desde la antigüedad, las aceitunas se ponían en remojo en agua salada para suavizarlas.
Al mismo tiempo, los habitantes descubrieron los secretos del aceite de oliva, obtenido al presionar los frutos. El aceite se ha convertido en un producto imprescindible para cocinar, asear e incluso como moneda de cambio. Hoy en día, estas tradiciones continúan y la aceituna sigue siendo un fruto precioso del mar Mediterráneo, cuidadosamente transformado para enriquecer nuestras comidas. Así que, si tienes un olivo, sobre todo, no dejes pasar el momento de la recolección.
¡Cosechar aceitunas es un arte! Se propaga de septiembre a febrero y depende de la aceituna y de su destino. Las aceitunas verdes se recogen temprano, entre septiembre y octubre. Las aceitunas negras para aperitivos, entre otros, están listas entre noviembre y diciembre. Pero para las que acabarán en aceite de oliva, esperaremos hasta diciembre, después de la primera helada. Todo esto, por supuesto, depende del clima: un verano caluroso hace que las aceitunas maduren más rápido, mientras que un verano lluvioso las hace esperar. Cada año, las cosechas se recogen en función del clima.
Sin embargo, la cosecha de aceitunas es un juego de paciencia. Las aceitunas negras, cuando están completamente maduras, se caen solas. Simplemente sacuda el árbol y coloque una lona debajo. Sin embargo, las aceitunas verdes son más tenaces. Se adhieren bien a las ramas, así que recójalas a mano, como las cerezas. Impuesto técnicas tradicionales son perfectas para tu jardín y suaves con los olivos. Por otra parte, a escala industrial se usan máquinas como peines o agitadores, pero ojo, pueden resultar un poco brutales con el árbol. Sin embargo, ya sea a mano o a máquina, es importante preservar el árbol durante la recolección de las aceitunas.
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