¿Qué es el metano y por qué es tan perjudicial para el calentamiento global?
Cuando hablamos de gases de efecto invernadero, el «chico malo» es sin duda el CO2, básicamente porque se produce mucho más que los demás. Pero a fin de cuentas, los efectos del metano pueden ser mucho más dañinos que el dióxido de carbono: entre 21 y 80 veces peores. Además, su persistencia en el medio ambiente también es significativamente mayor.
La fórmula química del metano, que es un hidrocarburo de la familia de los alcanos, es CH4 (un átomo de carbono y cuatro átomos de hidrógeno). Fue descubierto en 1776 por Alessandro Volta. Se encuentra en regiones naturales con poco o ningún oxígeno, como las marismas. Es producido por organismos vivos (plantas, animales, etc.) mediante fermentación y/o digestión.
Incoloro e inodoro, el metano constituye el 90% del gas natural, que es el tercer recurso energético del mundo después del petróleo y el carbón, y es el único hidrocarburo que se puede obtener mediante un proceso natural. Representa un grave riesgo para el medio ambiente, ya que es uno de los principales gases de efecto invernadero y es entre un 20 y un 60% peor que el CO2.
Desde el año 2000, ha habido un aumento de las emisiones de metano en el medio ambiente a nivel global. Los científicos advierten que el aumento de las emisiones de este y otros gases de invernadero contribuyen a la contaminación del aire y al cambio climático. Por ello, es fundamental tomar medidas para reducirlos.
Hay cada vez más
Gran parte de las emisiones de metano al ambiente está ligado a una causa natural porque proviene de microbios que crecen en humedales naturales y liberan materia orgánica cuando no hay oxígeno. Sin embargo, se estima que alrededor del 60% de las emisiones de este gas de efecto invernadero en todo el mundo son causados por actividades humanas.
Las principales fuentes, aunque no las únicas, son: la quema de combustibles fósiles (petróleo, carbón, turba) y las actividades agrícolas. Cada uno de ellos representa entre el 20 y el 25% de las emisiones globales de metano. Y las actividades ganaderas, que suponen hasta un 10% más y siguen siendo mayor en sistemas intensivos de cría de animales (macrogranjas).
Investigación del metano atmosférico
La intensificación de las actividades humanas parece ser la principal causa del importante aumento experimentado por las emisiones contaminantes de metano al medio ambiente. Y, en consecuencia, también se acumula en la atmósfera, agravando el calentamiento global.
Además, las concentraciones atmosféricas de este gas de efecto invernadero están estrechamente relacionadas con diferentes métodos aplicados en el tratamiento de residuos orgánicos, un problema que se ha disparado en los últimos años. Gran parte de este tipo de residuos proceden del desperdicio de alimentos.
Más metano, más calentamiento global
El metano es uno de los principales gases de efecto invernadero y uno de los que más contribuyen al cambio climático y al calentamiento global. Y aunque el dióxido de carbono sigue encabezando la lista, el metano tiene efectos más nocivos que el dióxido de carbono.
Según la opinión y el consejo de expertos, uno de los mejores aportes que el ser humano puede hacer para evitar que empeore el cambio climático es ahora reducir las emisiones de metano. Comer mucha menos carne roja es una buena medida para conseguirlo.
Por otro lado, debemos tener muy claro que el metano es uno de los componentes del gas licuado de petróleo, o GLP, o gas natural, así que deja de usarlo y no lo quemes. Dejar de utilizar este combustible fósil podría ser una medida muy eficaz para mitigar el cambio climático.
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