¿Qué es el glifosato y cuáles son los riesgos de usarlo
Seguramente has escuchado acerca de Monsanto, los alimentos genéticamente modificados y su relación con la producción de productos químicos agrícolas. Esta empresa ha sido objeto de numerosas controversias. La discusión en torno al glifosato está rodeada de polémica. Cuando se menciona esta sustancia, surgen muchas preguntas. Muchas personas se cuestionan qué es exactamente el glifosato, para qué se utiliza y si es seguro su uso.
Por eso, en este artículo te explicamos Qué es el glifosato, sus características y posibles riesgos al utilizarlo.
¿Qué es el glifosato?
El glifosato es un herbicida sistémico y no selectivo con efectos de amplio espectro que puede ser absorbido por cualquier planta a través de sus tejidos. Al inhibir la producción de proteínas vitales necesarias para el crecimiento, esta sustancia química finalmente provoca la muerte de la planta objetivo.
El objetivo principal de esta sustancia es eliminar las plantas consideradas no deseadas por los agricultores o categorizadas como malezas. Estas plantas compiten por recursos esenciales como espacio, luz, agua y nutrientes, lo que dificulta el cultivo de las plantas deseadas. Suele aplicarse antes de sembrar un solo cultivo, limpiando eficazmente la zona de vegetación indeseada.
Para suprimir el crecimiento de vegetación no deseada y permitir que los cultivos crezcan sin obstáculos, se utiliza el glifosato. Además, algunos agricultores emplean el glifosato antes de la cosecha para facilitar el proceso al inducir un efecto de secado en los cultivos.
El origen y uso del glifosato.
En la década de 1970, Monsanto, líder mundial en agroquímicos, introdujo el Roundup, un herbicida que contenía glifosato como ingrediente activo. Después de que expirara la patente de Monsanto en 2000, otras empresas como Dow Chemical-Dupont y Syngenta-ChemChina comenzaron a producir el herbicida, ampliando su producción.
Otro logro atribuido a Monsanto es la creación de variedades de maíz, soja y algodón genéticamente modificados que pueden resistir el glifosato. Esta innovación permite aplicar el herbicida incluso después de que las plantas hayan brotado sin dañarlas.
La resistencia de estas especies conduce a la destrucción de la vegetación nativa e impide la germinación de otras plantas en el suelo, lo que resulta en daños ambientales. El glifosato es actualmente el herbicida más utilizado en el mundo y es la principal opción en Estados Unidos. Aunque anteriormente se creía que su aplicación no tenía efectos nocivos para el medio ambiente o la salud humana, evidencias recientes han revelado el potencial daño que este compuesto químico puede causar.
El impacto ambiental del uso de glifosato
Aunque el uso de glifosato puede parecer conveniente para mantener grandes monocultivos y garantizar la disponibilidad de ciertos alimentos, tiene importantes repercusiones en el ecosistema circundante.
La creencia de que el glifosato no causa resistencia en ningún tipo de maleza ha sido defendida durante mucho tiempo. Sin embargo, cada vez más estudios muestran que ciertas especies, como las pertenecientes a los géneros Xanthium y Lolium, han desarrollado resistencia a este herbicida. Como resultado, estas malezas se consideran «tolerantes» porque el glifosato ya no las controla, lo que aumenta su población.
La presencia de muchas malezas resistentes tiene múltiples consecuencias adversas, afectando tanto a los cultivos como al medio ambiente. Aumenta la demanda de herbicidas y prácticas de control, lo que resulta en mayores costos de producción para el manejo de malezas. Esta mayor dependencia de los agroquímicos es un factor crucial.
Daños a la vida silvestre
Ante esta situación, los agricultores suelen aumentar las cantidades de glifosato para lograr el efecto deseado, a pesar de las advertencias de los fabricantes de herbicidas.
El exceso de glifosato tiene efectos nocivos en las plantas y animales de los ecosistemas. Una consecuencia específica es la devastación de la flora natural, la cual desempeña un papel fundamental en la provisión de hábitat y sustento para numerosas especies de insectos beneficiosos.
Su población disminuye y esto impacta negativamente en el control de plagas. Además, la destrucción de las plantas que alimentan a las abejas altera su ciclo de vida y afecta también a los seres humanos.
El glifosato se ha utilizado en la aplicación aérea para controlar el crecimiento de cultivos de coca, amapola y marihuana, principalmente en países latinoamericanos como Colombia y Brasil. Sin embargo, esta práctica ha tenido consecuencias no deseadas en la biodiversidad de las regiones selváticas, superando los objetivos planteados. Además, estudios han demostrado que el glifosato tiene una toxicidad leve a moderada para diversas especies de vida silvestre, incluyendo aves (como codornices y patos), anfibios, peces e invertebrados acuáticos.
El glifosato no solo afecta negativamente a la flora y fauna, sino que también ha contaminado fuentes de agua utilizadas para consumo humano. Como resultado, se han implementado regulaciones y leyes para controlar o sancionar el uso de este herbicida, dada la potencial amenaza que representa para la salud humana.
Los posibles efectos adversos del glifosato en la salud humana
En 2015 se logró un avance significativo en la regulación y minimización del uso de glifosato. El Centro Internacional de Investigación sobre el Cáncer (IARC) de la Organización Mundial de la Salud (OMS) llegó a la conclusión de que el glifosato es un probable carcinógeno.
A pesar de las afirmaciones de agencias como la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) y la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (US EPA) de que no representa ningún riesgo cuando se usa correctamente, todavía existen preocupaciones sobre sus posibles peligros.
El uso de glifosato tiene efectos inmediatos, como irritación en la piel y los ojos, mareos, náuseas, dificultad para respirar y presión arterial alta.
Esperamos que esta información te haya ayudado a entender más sobre qué es el glifosato y sus características.