Esta tarde, miles de personas se manifestaron en las calles de Basauri (Bizkaia) en contra del anuncio de la compañía de proponer un recorte que afectará a 546 trabajadores de las plantas de Basauri y Puente San Miguel (Cantabria), con 335 despidos en Bizkaia y 211 en Cantabria.
En la marcha participaron personalidades políticas y sindicales como el Secretario General del PSE-EE, Eneko Andueza, la Secretaria General de CCOO Euskadi, Loli García, la Diputada Foral de Empleo, Cohesión Social e Igualdad, Teresa Laespada, el Portavoz de EH Bildu en las Juntas Generales de Bizkaia, Iker Casanova, y el Alcalde de Galdakao, Iñigo Hernando.
Los manifestantes corearon consignas como «nadie ha dejado» o «si esto no se arregla, leña, leña» o «si esto no logra, Reed, Reed». También llevaron una pancarta con el mensaje «Bridgestone para defender el trabajo. No en la reubicación».
Los trabajadores que participaron en la marcha, junto con familiares, amigos y vecinos, llevaban ropa de trabajo y pegatinas que decían «no en los despidos. Borroka meres du. Strike. Plan industrial».
Los testimonios de los manifestantes destacaron la importancia de defender los derechos de los trabajadores en Bridgestone, resaltando la posición unánime de la fuerza laboral y el éxito del primer día de huelga, al mismo tiempo que señalaron la dependencia de muchas familias de la actividad de la planta en Basauri.
La fuerza laboral detuvo la producción de la fábrica después de un día completo de huelga y se concentró en las afueras de las instalaciones desde el inicio de la protesta.
Tras el anuncio de los despidos, los sindicatos de Bridgestone (CCOO, UGT, Sitb, Ela y Bub) convocaron a tres días de huelga en la planta de Puente San Miguel (Cantabria) los días 8, 10 y 15, y tres días en Basauri (Bizkaia) los días 8, 11 y 15.
Al final de la manifestación, se leyó una declaración en la que los trabajadores expresaron su preocupación por la reubicación de la fábrica y la transferencia de la producción a Polonia, acusando a la empresa de despedir a trabajadores de forma injusta y por motivos de codicia.
Además de las pérdidas de empleo, se destacó el impacto negativo en los contratos de los trabajadores de otras empresas que brindan servicios a Bridgestone, así como en el comercio local, lo que podría afectar a la economía de la zona.
El portavoz de los trabajadores mencionó la importancia histórica de Bridgestone como parte del patrimonio industrial de la región, instando a la unidad y al orgullo de los trabajadores para enfrentar la incertidumbre que se avecina.
La lucha contra la codicia y la defensa de los derechos laborales fueron destacadas como pilares fundamentales en la resistencia contra los despidos. «Juntos somos más fuertes en Bridgestone, nadie se ha ido», concluyeron.