Delegados de países de América Latina y el Caribe abordaron esta semana las respuestas regionales a situaciones de desplazamiento forzado en contextos de Desastres y efectos adversos del cambio climático.dentro del encuentro convocado Tercera consulta temática del Proceso Cartagena+40.
«Desafortunadamente, las comunidades que corren mayor riesgo son las que sufren las consecuencias de la explotación ambiental, que continúa marcando la pauta para las decisiones que se toman en todo el mundo», dijo Andrew Harper, Asesor Especial sobre Acción Climática del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados ( ACNUR). ), mediante una declaración.
Según datos del Observatorio de Desplazamientos Internos (IDMC), más de la mitad de los nuevos desplazamientos en 2023 corresponden a desastres relacionados con el clima como inundaciones y sequías, lo que equivale a 26,4 millones de personas desplazadas.
América Latina y el Caribe es un región vulnerable al impacto del cambio climático. El texto indica que casi el 60 por ciento de los refugiados y desplazados internos viven en países que se encuentran entre los más vulnerables a los desastres y al cambio climático.
Harper destacó el trabajo de los países de la región para «tomar la iniciativa en la creación de enfoques regionales para proteger a las personas que huyen de los impactos del cambio climático y los desastres», pero insistió en que se necesita apoyo comunitario a nivel internacional.
La reunión, que finalizó el viernes en Bogotá, fue convocada por ACNUR y el Gobierno de Chile, abordó las bases de la Declaración y Plan de Acción de Chile 2024-2034, que será adoptada a finales de año en la ciudad de Chile. Santiago y guiará las estrategias y soluciones de protección de los países de la región para la próxima década.
El proceso Cartagena+40 promueve “esfuerzos para proteger los derechos y encontrar soluciones duraderas para los desplazados internos; proporcionar rutas migratorias seguras, ordenadas y regulares para quienes se encuentran en situaciones de movilidad humana», comentó el Prof. Walter Kälin, Enviado Presidencial de la Plataforma sobre Desplazamiento por Desastres.
La Declaración de Cartagena es un instrumento legal de primer nivel para la región en términos de protección de refugiados. Además de delegaciones de 24 países de la región, al encuentro asistieron representantes de organizaciones de la sociedad civil y personas desplazadas forzadamente, la academia, el sector privado, entidades de desarrollo y organismos internacionales.