«No se puede perder dinero para siempre» – la importancia de gestionar adecuadamente tus finanzas.

«No se puede perder dinero para siempre» – la importancia de gestionar adecuadamente tus finanzas.

El presidente de Renfe, Raül Blanco, pidió proteger la sostenibilidad del sistema y afirmó que «no se puede perder dinero para siempre», en referencia a las pérdidas que tanto Renfe como sus competidores han mostrado en las líneas de alta velocidad del mercado ferroviario español, Iryo y Ouigo.

Así se expresó en un desayuno organizado por el Grupo Hotusa bajo el tema “El futuro del transporte ferroviario”, que tuvo lugar este viernes en el hotel Eurostars Madrid Tower y al que asistieron tanto Blanco como el CEO (CEO) y director general de Iryo, Simone Gorini.

El presidente de la empresa pública ferroviaria valoró positivamente la competitividad de precios resultante de la entrada en el mercado de diferentes operadores, pero al mismo tiempo destacó la importancia de mantener la «sostenibilidad del sistema y tener en cuenta las estructuras de las empresas», ya que hay que pensar también en el medio y largo plazo, porque si la guerra de precios continúa arrastra la calidad de los productos, «con los usuarios principalmente afectados».

«El precio de las entradas a menos de 10 euros no puede ser eterno, es muy complicado», reiteró el líder de la organización, mientras Gorini coincidió en que los precios deben estabilizarse al alza para darle «el valor justo, el valor que el producto se merece», porque «el valor es calidad».

Asimismo, tanto Blanco como Gorini también se alinearon en el tema de captar nuevas audiencias, lo cual es una prioridad para las dos empresas que representan. «A veces se asocia el tren a un determinado tipo de movilidad, de mayor edad, pero no es cierto, porque las posibilidades que hay en España, con todos los operadores, son muy amplias, por lo que los precios son muy asequibles», indicó el presidente de la corporación estatal.

Ambos dirigentes, sin embargo, mostraron sus diferencias en el tema de la bajada de impuestos, respaldada por la CNMC, y hacia la que se expresó plenamente el consejero delegado de Iryo, que afirmó que debe ser «un cambio justo y asequible». Por su parte, Raül Blanco, tras asegurar que piensa lo mismo que el Ministerio de Transportes, abrió el debate a la pregunta con qué objetivo se reducirían este tipo de impuestos.

«Si vamos a prolongar una eterna guerra de precios y seguir en una dinámica como la que se ha visto en algunos corredores estos últimos años, no sé si tiene mucho sentido», argumentó el representante de Renfe, para después añadir que sí, en cambio es «aumentar la inversión y mejorar la calidad del sistema», sí, estoy de acuerdo.

Por otro lado, sobre la cuestión de la opa húngara en la que está inmersa Talgo, Blanco afirmó que la opinión que importa «es la del Gobierno y la de las autoridades reguladoras», aunque admitió que le preocupa «la tiempos y el cumplimiento de los compromisos”.

«Deben cumplir sus compromisos de mantenimiento así como sus compromisos de homologación de los trenes S-106 en Francia, que es clave para la llegada del AVE a Francia», reiteró Blanco.

Respecto a la llegada de la empresa francesa Ouigo en octubre al corredor sur, en Andalucía, ambas corporaciones expresaron su confianza en que este hecho no provoque «una guerra de precios» como ocurrió en otros corredores. «Nos adaptaremos al comportamiento del mercado en este corredor, donde hemos visto un crecimiento muy importante», afirmó el presidente de Renfe.

Finalmente, en cuanto a la liberalización de la alta velocidad en nuevos corredores como Galicia o Asturias, Renfe, en palabras de su presidente, se centrará en lo que es «más importante para esta compañía, sus clientes y la generación de ingresos».

Por su parte, Iryo, a pesar de presentarse interesada en entrar en estos mercados, se mostró al mismo tiempo cautelosa, ya que su director general afirmó que estaba esperando detalles sobre esta operación, concretamente que la red ferroviaria de Galicia, por ejemplo, ya está muy heterogéneo en ancho métrico, lo que supone un «gran inconveniente» para la compañía italiana y para el que incluso tendría que adquirir nuevos trenes.

Finalmente, ambas corporaciones ferroviarias coincidieron en que a pesar de que el sector ferroviario es tradicionalmente conflictivo, «es absolutamente vital tener paz social y consensuar medidas».

FUENTE

nuevaprensa.info

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