Mañueco apuesta por la «estabilidad» y la «mano tendida» para lograr entendimiento sobre el PGC 2025

El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, afirmó que su Gobierno está proporcionando «estabilidad» a los ciudadanos de la Comunidad y confía en su política de «diálogo y mano tendida» para llegar a un «entendimiento». Con los partidos con representación en las Cortes se aprobó el proyecto de Ley de presupuestos generales de la Comunidad para 2025 después de que tuvo que prorrogar los de 2024 por falta de apoyo.

Fernández Mañueco abordó esta cuestión en un escrito del año remitido a Europa Press, en el que insistió en la importancia del diálogo político, del que informó que la Junta Directiva «fomentó» y «proporcionó insistentemente» con el fin de llegar a un acuerdo que facilite la aprobación de las cuentas. El presidente explicó que el proyecto de ley equivale «al presupuesto más grande de la historia».

En concreto, en este balance de 2024, el presidente destacó a Castilla y León como una Comunidad «moderna» con un «excelente presente» y un «magnífico futuro». En el ámbito económico, el presidente defendió la «fortaleza» de la economía en una Comunidad que se ha convertido en líder en crecimiento del PIB en 2024, a lo que se suma «el aumento de la producción industrial y el aumento de las exportaciones».

Fernández Mañueco se centró en la industria agroalimentaria, «la tercera más importante de todo el país y con más de 70 cifras de calidad». «Castilla y León tiene una economía solvente porque, además, seguimos creando empleo, de hecho hoy hay más gente trabajando que en los últimos 15 años y hay más mujeres trabajando que nunca en nuestra Comunidad», defendió.

Para Fernández Mañueco, la «calidad de los servicios públicos» es una cuestión básica para que la Comunidad avance y garantice la «calidad de vida» de los ciudadanos. En este sentido, el presidente destacó el «esfuerzo inédito» realizado por la Junta Directiva para «consolidar» la «mejor» asistencia sanitaria, con infraestructuras «de última generación» en todas las provincias, con «nuevas prestaciones» como radioterapia unidades o el «innovador» Plan de Medicina Personalizada y de Precisión.

Estas acciones fueron contrastadas con la «política de tensión» que, a su juicio, existe a nivel nacional. «Ante la política de tensión, desde el Ejecutivo que presido apostamos por la mano tendida y el diálogo, con el objetivo de alcanzar acuerdos a favor de los habitantes de Castilla y León», concluyó.

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