Los desafíos ambientales de Aagesen durante la transición ecológica

Los desafíos ambientales de Aagesen durante la transición ecológica
Sara Aagesen es ahora la nueva ministra de Transición Ecológica y Reto Demográfico en sustitución de Teresa Ribera. El exsecretario de Estado de Energía liderará una de las carteras más importantes del país, con diversos retos y frentes abiertos que afrontar en los próximos meses y años.
El ingeniero químico asume el ministerio en un momento histórico a nivel energético. El éxito o el fracaso de los desafíos nacionales y europeos en materia de cambio climático, descarbonización y transición energética marcarán el futuro de las generaciones venideras.
Aagesen tendrá que abordar toda una serie de cuestiones de corto y medio plazo que definirán su figura política. Uno de ellos, el más cercano, es el relacionado con impuesto extraordinario a las empresas energéticas -llamado «impuesto» en el sector- y sus posibles consecuencias.

A poco más de un mes para que expire el impuesto temporal que grava el 1,2% de los ingresos de las empresas con una facturación superior a los 1.000 millones de euros, su continuación está en el aire.
Tras semanas de intensas negociaciones, el Gobierno llegó a un acuerdo con Podemos extender el impuesto a través de una factura o, en el peor de los casos, por Real Decreto. Una cifra que genera dudas por los difíciles requisitos legales al no estar diseñada para crear impuestos.
Sin embargo, Junts asegura que su acuerdo con el Ejecutivo de coalición sostiene que El impuesto no penalizará a aquellas empresas que inviertan en la transición energética, lo que reduce considerablemente el área de impacto de esta medida fiscal.

Ante esta incertidumbre, las principales energéticas del país se unieron en un comunicado del Club Español de la Energía (Enerclub) para advertir de que la carga fiscal Pone en riesgo 30.000 millones de inversiones.
De ellos, Repsol ha sido el más beligerante en los últimos meses con la prórroga del impuesto y así lo ha manifestado en multitud de ocasiones, llegando incluso a alertar sobre la deslocalización de inversiones a otros países.
La tensión entre la empresa que dirige Josu Jon Imaz y el Gobierno es palpable y la ausencia de la representación de la petrolera en la inauguración de Aagesen el lunes, pese a la poca antelación con la que fue notificada, complica la relación entre ambas partes.
Más allá de los impuestos, Aagesen tiene una dura tarea por delante para garantizar que se cumplan los compromisos del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC).
La estrategia energética por la que se regirá el país hasta 2030 es ambiciosa, por lo que no está exenta de críticas por un excesivo optimismo. Aspectos como el almacenamiento eléctrico, el desarrollo del hidrógeno verde o el autoconsumo están en el centro de atención, ya sea por su falta de madurez o por la disminución de la demanda en el sector.

En este sentido, el aumento de la demanda eléctrica previsto por el Gobierno en los próximos años está relacionado con los requerimientos de las empresas energéticas en aumenta el retorno de la inversión en redes distribución para poder dar acceso a toda la demanda.
Actualmente, esta retribución es del 5,58% para el periodo regulatorio vigente de 2020 a 2025. El sector pide ser comparable a otros países europeos, donde el porcentaje varía entre el 7% y el 9%.
Desde Endesa, por ejemplo, piden elevarlo hasta el 7,5% y condicionar buena parte de sus inversiones en el plan estratégico a incrementarlo hasta el punto mencionado anteriormente.
Teresa Ribera será recordada, entre otras cosas, por ser la artífice del programa para cerrar las centrales nucleares de España. Con una postura un tanto antinuclear, Ribera ha acordado con las empresas propietarias retirar progresivamente entre 2027 y 2035 todos los reactores actualmente activos.
Desde el sector se intensifican los mensajes pronucleares que se avecinan la apuesta de otros países europeos por esta energía en un momento de incertidumbre geopolítica (guerra en Ucrania, tensiones con Rusia, conflicto en Oriente Medio) que plantean dudas sobre el mercado del gas.
El lobby nuclear cree que el sistema eléctrico podría verse afectado sin su energía y todavía mantiene cierta esperanza en una ventana de diálogo con el nuevo ministro para poder, al menos, alargar la vida útil de las plantas.
Los pagos por capacidad para las plantas de gas, la nueva normativa de autoconsumo, la revisión del régimen especial de energías renovables, la transposición de la normativa europea para materias primas críticas o el despliegue de la energía eólica marina también serán retos que Aagesen deberá liderar en el Gobierno.

The dog is chasing the ball in the park. It is a sunny day and the grass is green.

El perro está persiguiendo la pelota en el parque. Es un día soleado y el césped está verde.

FUENTE

nuevaprensa.info

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *