Los ambientalistas acusan a Roqueñí de mentir cuando dice que no hubo ni un solo permiso de vertedero
El coordinador de Medio Ambiente afirmó este jueves que la ministra de Transición Ecológica, Nieves Roqueñí, mintió ayer a la Asamblea General cuando dijo que «no había ni una sola autorización para el almacenamiento de pilas en Asturias».
El grupo ecologista recuerda a Roqueñí que su Departamento ya ha autorizado dos de los parques previstos, uno en Salas y otro en Siero, sin atender a las alegaciones presentadas por el coordinador.
«Si no hay más autorizados es por nuestra actividad de informar a los habitantes de las ciudades donde se llevan a cabo estos proyectos de instalaciones eléctricas, de los que nunca fueron informados ni por el Principado ni por los Ayuntamientos», indica el organización.
También explican que de los 38 proyectos públicos conocidos, sólo están en la zona industrial, ocho (tres en Oviedo, dos en Gijón, uno en Avilés, uno en Mieres y uno en Llanera) el resto están en zona rural.
“Nuestro principal argumento es la corta distancia entre los parques de baterías y las viviendas. La proximidad implica una fuerte contaminación electromagnética para el barrio. Los datos recogidos hasta ahora muestran que la exposición excesiva a campos electromagnéticos aumenta el riesgo de leucemia en adultos, cáncer de mama o de cerebro, y afecta por igual a hombres y mujeres», insisten los ecologistas.
Por ello, reiteran que la colocación de sistemas de almacenamiento de energía en baterías (BESS) debe cumplir con criterios prácticos y responsables instalándolos en zonas industriales.
En estos momentos hay 38 proyectos en tramitación pública de los 70 que el Principado reconoce como en marcha, por lo que hay 32 más cuya ubicación y capacidad desconocemos.
De momento, los concejos asturianos con proyectos reportados son Salas, Salime, Siero (4 parques), Llanera (2), Mieres, Cangas de Onís, Oviedo (10), Avilés (2), Corvera, Lena, Colunga, Villaviciosa (2), Soto Ribera, Regueras, Piloña (3), Gijón (2), Candamo (2), Gozón (1). La mayoría de ellos están ubicados en terrenos agrícolas, alterando la coherencia visual del entorno.
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