La importancia de elegir la funda de almohada adecuada
Seguramente ya has escuchado que es fundamental dormir bien para mantener la salud y regenerar el cuerpo y la mente durante la noche. Pasar un tercio de tu vida durmiendo es mucho, por lo que es importante contar con una buena ropa de cama, sin olvidar la comodidad. La seda es el material ideal para una funda de almohada. De hecho, con la seda no corres el riesgo de despertarte con marcas en la cara como ocurre con el algodón. Con el tiempo, estos «pliegues del sueño» causados por frotar la cara contra la funda de la almohada persisten y se convierten en arrugas. Un material suave como la seda te ayuda a evitar este tipo de problemas.
Seda: aliada del cabello
La seda tiene más ventajas, incluyendo ser beneficiosa para el cabello. Si tu funda de almohada es de seda, tu cabello recuperará su belleza. Debido a que la seda contiene proteínas y aminoácidos, tu cabello se beneficiará de una excelente hidratación. La seda actúa como una barrera protectora. Como resultado, tu cabello lucirá brillante y las puntas estarán menos abiertas.
Además, tu cabello se deslizará sobre la funda de almohada de seda ya que limita la electricidad estática, lo que hará que sea menos quebradizo y reducirá el riesgo de caída. Es una diferencia real en comparación con una funda de almohada de algodón. Ya no te despertarás con el pelo enredado y revuelto.
La seda y sus beneficios en la piel
Si cambias la funda de tu almohada de algodón por una de seda, notarás una gran diferencia en la piel de tu rostro.
En primer lugar, la seda tiene virtudes anti-envejecimiento. Gracias a su rica composición de ácidos animados y proteínas naturales, las células de tu piel estarán mejor protegidas de los efectos del envejecimiento.
Entonces, si eres fan de los tratamientos de belleza, ya sabes que la seda mejorará su eficacia. Si alguna vez te has despertado y no has notado ninguna diferencia en tu piel, probablemente hayas dudado de la eficacia de tu tratamiento. Sin embargo, la culpable podría ser tu funda de almohada. De hecho, este material no absorbe cremas de noche ni otros tratamientos (incluidos los capilares). Por lo tanto, el tratamiento actúa durante toda la noche. Al despertar, notarás que tu piel está suave y fresca, beneficiándote de un cutis radiante.
Finalmente, la seda se deshidrata menos que el algodón. Con una funda de almohada de seda, mantendrás la hidratación natural de tu piel, conservando así un aspecto juvenil.
La seda limita las alergias
La seda continúa revelando sus ventajas. También es un material hipoalergénico. Por un lado, permitirá que la piel respire y prevendrá la aparición de diversas imperfecciones, especialmente granos. Si sufres de acné o eccema, la funda de almohada de seda es ideal.
Por otro lado, debido a su tejido, la seda retiene pocas impurezas. De esta manera, tu rostro no estará en contacto constante con el polvo u otros alérgenos. Si tienes la piel sensible o reactiva, o sufres de problemas respiratorios, la seda es el material más adecuado para tu funda de almohada.
El material ideal para todas las estaciones.
Si buscabas una funda de almohada que te sirva tanto en verano como en invierno, la de seda es la indicada para ti. Este material es un regulador de temperatura, lo que significa que te mantendrá fresco en verano y cálido en invierno. No tendrás que preocuparte de despertarte en medio de la noche por tener demasiado calor o frío.
La seda, la tendencia de los últimos años
Anteriormente reservada para hoteles de lujo, la seda se ha convertido en pocos años en un material de moda para la ropa de cama. Además de sus numerosos beneficios, es 100% natural y aporta un toque de elegancia a tu dormitorio.
La seda es un material de alta gama que tiene virtudes, a veces inesperadas, en el rostro, en el cabello y, en general, en el sueño. Disfrutarás de una suavidad inigualable y un tacto agradable.