En la última línea para las elecciones generales La violencia sigue imparable en algunas regiones de México.
En una localidad del sur del país, el viernes fueron incendiadas las oficinas del organismo electoral local, así como el material que iba a ser utilizado envotar el 2 de junio.
En el sur de México, la violencia continúa sin control en la recta final hacia las elecciones generales. El viernes, en una localidad del país, las oficinas del organismo electoral local fueron incendiadas, junto con el material que se utilizaría para votar el 2 de junio.
El incidente se convirtió en la última expresión de violencia que enturbia el proceso electoral, que esta semana cobró la vida de un candidato a la alcaldía del sureño estado de Guerrero y dejó a un candidato del gobierno local en medio de un tiroteo en el occidental estado de Michoacán.
En una localidad del sur de Chiapas, los equipos del organismo electoral fueron incendiados, así como los documentos electorales, en medio de una ola de violencia que ha afectado la región tras un reciente asesinato. Estos hechos reflejan un intento desesperado de grupos criminales por influir en las elecciones del domingo.
La mañana del viernes fueron incendiados los equipos del organismo electoral en la localidad de Chicomuselo, en el sureño estado de Chiapas, y los documentos electorales. En los últimos días, Chicomuselo se ha visto afectado por una ola de violencia tras el asesinato de 11 civiles el 13 de mayo.
Para los analistas, estos hechos representan un último intento por parte de poderosos grupos criminales que operan en México de desempeñar un papel más decisivo en la votación del domingo.
«Lo que estamos viendo en este período final es una estrategia decididamente desesperada por parte de algunos grupos de narcotraficantes para eliminar del camino a aquellos candidatos que en última instancia podrían ganar y representarles un desafío», dijo el analista político David a Associated Press. especialista en seguridad.
Según Saucedo, los últimos estallidos de violencia revelan que habrá grupos de narcotraficantes que «no aceptarán la pérdida de territorios… Intentarán conquistar por la fuerza lo que no pueden conquistar con el voto».
En el las elecciones del domingo Además del presidente, se elegirán ocho gobernadores, el alcalde de la capital, aproximadamente 19.000 funcionarios locales y 628 congresistas.
El proceso electoral mexicano termina con 31 candidatos asesinados y 105 agredidos, según un informe publicado el viernes por la organización local Data Cívica, que lleva seis años realizando un estudio sobre la violencia política en México.
Las muertes y ataques reportados hasta ahora han hecho de las elecciones de este año una de las más violentas de la historia reciente, superando las elecciones de 2018, cuando fueron asesinados 152 políticos.
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