InsectEAT: biorrefinería que vende 80 toneladas de cañaveras en su primer año.

InsectEAT: biorrefinería que vende 80 toneladas de cañaveras en su primer año.

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Archivo – Tenebrio Molitor en InsectEAT, la biorrefinería de insectos ubicada en Cañaveras (Cuenca). – EUROPA PRESS – Archivo

La biorrefinería de insectos InsectEAT, ubicada en Cañaveras (Cuenca) y dirigida por los hermanos Miguel y Javier Chavarría, espera cerrar su primer año con ventas de casi 80 toneladas de productos derivados de la Mosca Soldado Negra y el Tenebrio Molitor. Estos insectos ricos en proteínas y micronutrientes se transforman en harina integral, harina desgrasada, aceite y fertilizante vegetal.

En una entrevista con Europa Press, los hermanos explican que la idea de la biorrefinería surgió durante la pandemia del Covid-19, al leer sobre las primeras granjas de insectos en Europa. Decidieron llevar a cabo un negocio innovador y sostenible en el campo, participando en un concurso empresarial del que resultaron finalistas. Con parte del dinero obtenido y una subvención de fondos europeos, pudieron iniciar el proyecto.

La fábrica de InsectEAT, inaugurada en junio, se encuentra estratégicamente ubicada cerca de Madrid, Valencia y proveedores en Castilla-La Mancha. Con solo un trabajador al inicio, la biorrefinería prevé cerrar el año con 60 toneladas de productos de Mosca Soldado Negra y 20 toneladas de derivados de Tenebrio Molitor.

Los hermanos esperan crecer en el próximo año, ampliando la plantilla y la capacidad productiva. Destacan la sostenibilidad de los insectos como una ventaja, ya que requieren menos recursos que la ganadería tradicional y emiten menos CO2. Consideran que adaptar el sistema productivo actual es crucial para el futuro del medio ambiente.

InsectEAT trabaja con decenas de franquicias de granjas de insectos, procesando Mosca Soldado Negra y Tenebrio Molitor en su biorrefinería. Estos insectos se convierten en harina, aceite y fertilizante, productos dirigidos principalmente a la alimentación animal en la acuicultura, avicultura, porcicultura y mascotas.

Los productos de InsectEAT son duraderos y de alta calidad, contribuyendo a la economía circular y al desarrollo rural. Aunque actualmente se centran en la alimentación animal, los hermanos consideran la posibilidad de expandirse a la alimentación humana en el futuro, una vez que el mercado esté preparado.

La innovación, la sostenibilidad y el respeto por el medio ambiente son los pilares de InsectEAT. Los hermanos animan a los jóvenes a emprender proyectos en zonas rurales, destacando las oportunidades empresariales que existen en este sector. A pesar de los desafíos, consideran que el resultado final es gratificante.

FUENTE

nuevaprensa.info

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